SANTANDER, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las empresas tradicionales de VTC (vehículo turístico con conductor) de Santander creen que pueden "coexistir" con el servicio del taxi, pero piden para ello una regulación "ordenada" del sector, para lo cual han enviado un documento con sus propuestas a la administración, que se suma a las propuestas planteadas por los taxistas y que, a su juicio, implicaba una actividad "restrictiva e impositiva" hacia las VTC.
Así lo considera la Asociación de Autoturismos Santander, que representa a las VTC "históricas" de la ciudad, que no ve que las propuestas del taxi sean "el mejor punto de partida" para una negociación orientada a una regulación "bidireccional y conjunta".
En un comunicado explican que lo que pretenden es que se "se tenga en cuenta" a las empresas cántabras que llevan "50 años trabajando aquí, pagando nuestros impuestos, conviviendo con el taxi y respetando la ley", y demandan que se adopten medidas para "evitar un mal mayor" cuando termine la moratoria dada por el Gobierno central y solucionar el problema dejando "claras" las normas y competencias de VTC y taxis.
"Estamos abiertos a una negociación de una regulación justa, coherente y en la que nuestros derecho sean tenidos en consideración", aseguran estas empresas, que aclaran que en el caso de comunidades autónomas o ciudades pequeñas, como Cantabria o Santander, se precisa también el compromiso de las administraciones (Gobierno y Ayuntamiento) y de ambos sectores para "llevar a buen puerto una negociación para una regulación ordenada".
Insisten en este sentido las VTC que los dos servicios, aunque son "diferentes", pueden "coexistir" como hasta ahora, eso sí, "si cada uno respeta su parcela y su regulación evitando la intromisión en el campo del otro".
Aclaran al respecto que si el problema o confrontación que se está dando en otras regiones no ha llegado a la nuestra se debe a que la mayoría de las licencias de Cantabria están trabajando fuera.
Pero avisan de que "la cantidad de licencias es tan elevada y desproporcionada que en el caso de estar todas en Cantabria sería inasumible". Así, para más de medio millón de personas prestan servicio unos 500 taxis y 50 VTC, por lo que asumir la llegada de unas 140 más -cerca del 30% del total y más de 300 sobre las licencias actuales- significaría 2impactar gravemente la viabilidad del servicio actual de taxis y VTC históricas", haciendo "inviable" el equilibrio entre oferta y demanda.
Estas empresas tradicionales aprovechan para denunciar que "una gran mayoría" de las licencias concedidas en 2009 fueron usadas de modo "especulativo" y, también, para actuar en centros urbanos con una función "para la que no fueron creadas", que era ofrecer transporte discrecional, de uno a ocho pasajeros, cuando el origen o destino sea la comunidad de expedición de la tarjeta de transporte.
Algo que "históricamente", aseguran, han venido cumpliendo, con su cartera de clientes, públicos y privados, así como que el 80% de la facturación sea en la región y solo el 20% restante fuera de la misma.
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