La Junta revisará las bibliotecas de C-LM después del robo de dos mapas de Ptolomeo de la Biblioteca del Alcázar

Actualizado: martes, 11 agosto 2009 18:52

El trabajador que reconoció al individuo gracias a una fotografía de baja calidad distribuida por la Guardia Civil

TOLEDO, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Cultura, Turismo y Artesanía, Soledad Herrero, aseguró hoy que el Gobierno regional revisará las medidas de seguridad de todas las bibliotecas de Castilla-La Mancha, después de que a finales del mes de julio el presunto ladrón de 67 documentos históricos, de origen húngaro, sustrajese de la Biblioteca regional, ubicada en el Alcázar de Toledo, dos mapas de Claudio Ptolomeo "de gran valor histórico y económico".

En rueda de prensa, acompañada de la subdirectora de la Biblioteca regional, Carmen Morales, y del director general de Promoción Cultural de la Junta, Rafael de Lucas, Herrero reconoció "desde la humildad" que este tipo de cosas "pueden pasar", a pesar de las fuertes medidas de seguridad que caracterizan a este tipo de recintos.

En este sentido, la consejera dejó claro que en la sala en la que presuntamente se cometió el robo es donde habitualmente se consultan los libros antiguos de la Biblioteca, "no hay ningún ángulo oculto porque las cámaras de seguridad cubren toda la estancia, que además está permanentemente vigilada por varias personas".

Los mapas sustraídos, que pertenecen a un Atlas de Ptolomeo de 1513, son de tamaño A-3. Explicó que este tipo de personas, "que son amantes del Patrimonio cultural", suelen realizar un trabajo bastante preciso que, en este caso, se llevó a cabo a través de un corte limpio del papel realizado con un cúter, por lo que "no quedó ni una huella. Es más, nos dimos cuenta del robo porque el libro estaba paginado --desde el año 2000-- y vimos que faltaban dos hojas", explicó.

Esto significa que los documentos se encuentran en buen estado, aunque la consejera no lo confirmó ya que la unidad de Patrimonio Histórico de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sólo les ha notificado que "están los documentos, y punto", pero "no cómo están". Además, la Junta no sabe cuándo se devolverán de nuevo a la Biblioteca regional, ya que continúa la investigación.

En referencia al presunto ladrón, que ya ha pasado a disposición judicial después de su detención en Pamplona, Soledad Herrero explicó que se presentó en la Biblioteca de Castilla-La Mancha, por primera vez, el pasado 25 de julio.

"Tenía buena presencia, portaba un maletín y unos folios --donde presuntamente escondió el cúter con el que sustrajo los mapas de Ptolomeo--, y se identificó con un pasaporte eslovaco", mientras que el hotel donde se registrara en las mismas fechas presentó otro pasaporte diferente, según comentó Herrero.

Respecto al robo, sopesó la posibilidad de que se produjera el segundo día que el ladrón visitó la Biblioteca regional, es decir, el lunes 27 de julio, aunque tampoco supo concretarlo "porque las cintas de vídeo están en posesión de la Guardia Civil". Según comentó, lo normal en estos casos es que el presunto ladrón acuda el primer día a observar, el segundo a robar y un tercer día, sin ningún elemento que lo incrimine --ni cúter ni mapas-- a controlar que todo está bajo control.

IDENTIFICACIÓN DEL LADRÓN

Sin embargo, en esta ocasión hubo una persona, un trabajador de la Biblioteca, que sospechó de esta persona, "no por su comportamiento, ya que sólo tomó notas y midió, que es lo que hacen los investigadores, sino por su fisionomía", que relacionó con la fotografía de baja calidad de un presunto ladrón de documentos históricos difundida por la Guardia Civil, que le estaba siguiendo la pista desde hacía varios meses. Aunque se constató demasiado tarde que se había producido un robo porque el individuo ya se había marchado del recinto, explicó la consejera, inmediatamente se puso la denuncia.

La rápida actuación en Toledo, a juicio de Soledad Herrero, "ha sido el gran detonante, me consta, para detenerlo". "Ha sido una suerte, no sólo porque se hayan recuperado los dos mapas sustraídos de Toledo en un tiempo récord de diez días, si no porque se han recuperado otros 67 documentos históricos más y sabemos que tenía previsto ejecutar otros robos en 28 ciudades más. También ha sido una suerte que estos documentos no hayan pasado al mercado negro", expresó.

En este punto, la consejera de Cultura, Turismo y Artesanía insistió en que, a pesar de que ella misma conocía la noticia hacía 15 días, "hemos estado sin decir nada porque hemos seguido un protocolo que, aunque no nos ha sido impuesto, sí que se nos ha recomendado, porque cuando todavía no se ha detenido al ladrón en este tipo de casos es muy fácil que el documento pase al mercado negro", añadió.

"Sabíamos que la Guardia Civil le estaba pisando los talones, y la prueba es que se le ha detenido diez días después de poner la demanda en Toledo", explicó Herrero, que agradeció a la UCO su "labor" y su "profesionalidad", que han obtenido como resultado "un éxito extraordinario", ya que no sólo se han recuperado los documentos sustraídos en Toledo, sino un total de 67 procedentes de diferentes bibliotecas del mundo.

También expresó su "admiración y respeto" hacia los miembros que han intervenido en la investigación, porque "han tenido gran paciencia ante mi impaciencia, ya que he estado en contacto con ellos mañana, tarde y noche"; hacia los medios de comunicación "que han tratado la noticia en el momento oportuno", así como al personal de la biblioteca.

Finalmente, Soledad Herrero aseguró que las bibliotecas de toda la región poseen buenos sistemas de seguridad, insistiendo de nuevo que, "desde la humildad", este tipo de cosas "pueden pasar", a pesar de las fuertes medidas de seguridad existentes.

FONDOS DE LA BIBLIOTECA DE C-LM

La Biblioteca de Castilla-La Mancha cuenta con la colección de fondos antiguos Formol Lorenzana, formada por más de 100.000 volúmenes, entre ellos, 700 manuscritos, 414 incunables y el resto impresos de los siglos XVI al XIX.

Su origen se encuentra en la Biblioteca Arzobispal que el cardenal Lorenzana fundó en 1773 por orden y mandato del rey Carlos III. Esta colección se enriqueció en 1794 con la colección de don Luis María de Borbón, quien después también fuera cardenal. Después, se fueron incluyendo también fondos procedentes de los conventos a partir de la desamortización de los bienes eclesiásticos.

La colección se encuentra custodiada en cinco depósitos cerrados al público, debidamente climatizados para su perfecta conservación y vigilados las 24 horas del día por cámaras de seguridad, alarmas y personal de vigilancia, por lo que "hay una completa seguridad".