VALLADOLID, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Alianza UPA-COAG ha solicitado públicamente a la Junta de Castilla y León que apruebe la normativa que prohíba el uso del 'fracking' o fractura hidráulica como técnica de investigación y extracción de gas no convencional la Comunidad.
La Alianza, que ha recordado que la Unión europea deja a los países implicados que tomen sus propias medidas y que la próxima primavera comenzará el estudio sísmico en el permiso Luena, entre Cantabria y norte de Burgos, mientras que no se ha exigido a la compañía la memoria de impacto ambiental, ha trasladado su oposición al uso de la fractura hidráulica "porque supone asumir importantes riesgos para la seguridad y para el modelo de vida de la comarca".
En un comunicado recogido por Europa Press, la Alianza pone de manifiesto que así lo reconoce, entre otros, el informe realizado en mayo del 2012 por la Dirección de Medio Ambiente de la Comisión Europea, que se refiere a la contribución a la identificación "de posibles riesgos ambientales y para la salud humana derivados de las operaciones de extracción de hidrocarburos mediante fractura hidráulica en Europa".
"Es por ello que no podemos, ni debemos, ni queremos asumir los correspondientes riesgos, pues entendemos que estos no tienen precio", asegura antes de solicitar a la Junta que, con carácter de urgencia, apruebe la normativa que prohíba el uso del 'fracking' o fractura hidráulica como técnica de investigación y extracción de gas no convencional de toda la Comunidad e instar al Gobierno de España y a su Ministerio de Industria, Energía y Turismo "que deroguen las autorizaciones de Extracción de Hidrocarburos mediante prácticas no convencionales".
