VALLADOLID, 3 Jul. (EUROPA PRESS) -
Cáritas autonómica de Castilla y León ha atendido a más de 21.000 personas y ha realizado más de 113.00 intervenciones entre el 1 de marzo y el 30 de junio de 2020, meses en los que se ha experimentado una mayor demanda debido a la crisis motivada por la pandemia de COVID-19.
Así lo ha explicado el presidente de la organización regional, Antonio Jesús Martín de Lera, quien, junto al obispo auxiliar de Valladolid, Luis Argüello, ha presentado la memoria anual correspondiente a 2019.
No obstante, en un contexto en el que, según ha apuntado Martín de Lera, parece que 2019 queda "muy lejano", ha ofrecido algunas pinceladas sobre la atención en los cuatro meses que se han visto afectados por el estado de alarma y en los que se ha advertido un incremento en la demanda de ayudas.
Según ha explicado Martín de Lera, el perfil de los solicitantes era el de una persona de mediana edad, entre los 35 y los 55 años, con un sueldo que le permitía "vivir pero no ahorrar" y que ha acudido a Cáritas ante los retrasos en los pagos de subvenciones o ERTE.
En lo que respecta al servicio de acogida, se ha atendido a unas 12.000 personas y se han realizado 33.000 intervenciones entre los meses de marzo y junio.
Asimismo, el presidente de la organización en Castilla y León ha advertido de un aumento de las personas sin hogar, de las cuales Cáritas ha acogido a 790 en sus centros durante el confinamiento.
Por otro lado, Martín de Lera ha destacado también que, a pesar del cierre de colegios, se han mantenido los programas de infancia y juventud, con 1.507 participantes, a quienes se ha prestado atención tanto telemática como presencial.
De igual modo, ha puesto el foco sobre las personas de la tercera edad, a quienes la pandemia ha afectado en las residencias dependientes de las diócesis y en las que ha reconocido que también ha habido fallecidos.
En este sentido, el presidente de Cáritas en Castilla y León ha criticado que "a veces se ha pretendido que las residencias de mayores fuesen centros hospitalarios y a algunos se les ha negado insistentemente la asistencia en hospitales".
Asimismo, ha elogiado la labor de los trabajadores de estos centros, para quienes no ha habido "horarios ni días festivos" y que han dado el "200 por cien de su capacidad".
Ya de cara al futuro, Martín de Lera ha reconocido que se presenta un escenario de "incertidumbre" tanto en el ámbito sanitario como en el económico y social, pero aunque las previsiones sean "malas", ha aseverado que Cáritas trabajará con "esperanza" porque se ha visto que la gente "responde" ante la crisis con "solidaridad".
"Va a ser un año muy difícil y muchas personas van a necesitar ayuda", ha advertido, por lo que ha hecho un llamamiento a la responsabilidad tanto de la sociedad como de las instituciones públicas, a las cuales ha recordado el papel "capital" del tercer sector para combatir la crisis.
MEMORIA DE 2019
A lo largo de 2019, Cáritas ha atendido directamente a 71.755 personas y ha llegado, de forma indirecta, a 132.487 con sus proyectos sociales, en los que ha invertido cerca de 34 millones de euros.
El quehacer de las Cáritas Diocesanas se fundamenta en la acogida, el encuentro y el acompañamiento orientado a la promoción, autonomía, corresponsabilidad y participación de las personas. Este acompañamiento se desarrolla mediante 381 equipos parroquiales, 82 interparroquiales, arciprestales y diocesanas y 92 centros sociales.
Un total de 4.972 voluntarios ponen al servicio de la sociedad sus capacidades profesionales y humanas para contribuir una sociedad más caritativa y junto a ellos, caminan los 5.219 socios y 6.690 donantes que contribuyen a esta labor compartiendo sus bienes.
Castilla y León invirtió 33.885.676 euros lo que supone un descenso con respecto al ejercicio anterior de más de tres millones. De esta partida, los ámbitos a los se destina más inversión son los mayores (10.872.605), acogida y asistencia (4.773.833), empleo y economía social (4.209.807), personas sin hogar (3.537.163), personas con adicciones (2.987.674) y, por último, infancia (1.371.440).
Según ha apuntado Martín de Lera, el Informe FOESSA sobre Exclusión y Desarrollo Social en Castilla y León 2019 ya ponía de manifiesto datos "preocupantes" en la Comunidad, como el número de personas en exclusión social, 368.000, es decir, el 15,3 por ciento de la población se encontraba dentro de la sociedad estancada y algunos retos en lo relativo a vivienda digna, empleo, sanidad y envejecimiento poblacional.
Ahora, sumergidos en la crisis sanitaria, social y económica tras el impacto de la COVID-19 ha advertido de un empeoramiento notable de la situación avalado por los datos recogidos hasta la fecha, a raíz de las intervenciones de las Cáritas Diocesanas durante el estado de alarma, que auguran un aumento de la pobreza severa.
No obstante, a pesar de la "incertidumbre" de este escenario, ha abogado por abordarlo con "esperanza" y ha invitado a que "crezca la compasión".
En esta misma línea, el obispo auxiliar de Valladolid, Luis Argüello, ha apuntado que "esta sociedad de cuidados pide una vida comunitaria con un mayor protagonismo de la familia" y ha apelado a una mayor cercanía ya que considera que "no se puede funcionar solo por protocolos".
