Casado señala que no está blindado científicamente mezclar vacunas

Publicado: miércoles, 19 mayo 2021 14:51

   La consejera critica que el cambio de criterio en el reparto de vacunas ha supuesto una importante merca en la recepción de dosis en CyL

   VALLADOLID, 19 May. (EUROPA PRESS) -

   La consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, ha advertido este miércoles de que "no está blindado científicamente mezclar vacunas" después de un estudio del Instituto Carlos III concluyera que los vacunados con AstraZéneca fuera del grupo diana --entre 60 y 69 años-- recibieran una segunda dosis de Pfizer, al tiempo que ha señalado que esta opción comprometería la segunda dosis de la alemana a grupos vulnerables.

   Casado se ha referido a este asunto en una comparecencia ante los medios de comunicación en la que ha analizado la situación epidemiológica de la Comunidad y donde ha evaluado los primeros resultados aportados por el Carlos III.

   La consejera ha asegurado que este informe que el Ministerio trasladó a los directores de Salud Pública de las autonomías generó un intenso debate que seguirá este miércoles en el Consejo Interterritorial, donde ha confiado en que se tome una decisión final sobre las segundas dosis de AstraZéneca.

   Casado ha insistido en que el estudio se basa en una muestra de 600 personas cuando los efectos adversos se pueden calcular en torno al millón de personas, por lo que ha defendido la necesidad de contar con una muestra más amplia para valorar la seguridad de que la segunda dosis sea de Pfizer.

   Además, la consejera ha respaldado que mezclar vacunas sí ofrece más inmunidad pero también más nivel de reacción y, además, como ha señalado, contraviene las recomendaciones de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) que ha apostado por terminar con la pauta de AstraZéneca.

   A estos argumentos Casado ha sumado para defender mantener la pauta con AstraZéneca que la ficha de la vacuna no se ha modificado y, además, supondría "detraer una cantidad muy sustancial" de dosis de Pfizer, lo que comprometería la posología de segundas dosis a grupos vulnerables como son mayores de 70.