BURGOS 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido en el aeropuerto de Madrid-Barajas a dos burgaleses acusados de tratar de introducir presuntamente en España 6.340 gramos de cocaína, según han informado a Europa Press fuentes de la Subdelegación de Gobierno en Burgos.
Los detenidos son una pareja formada por un varón de 36 años, cuya identidad responde a las iniciales J.C.G.A, y una mujer de 37, M.A.R.G. y, según las mismas fuentes, los policías de la Comisaría de Burgos llevaban varios meses controlando sus movimientos con la sospecha de que podían estar siendo utilizados como "mulas", es decir, personas que transportan sustancias estupefacientes, generalmente en sus cuerpos, con el objeto de introducirlas clandestinamente en un país consumidor desde las zonas productoras.
Los detenidos fueron abordados por los policías cuando, tras descender del avión en la terminal internacional del aeropuerto madrileño, se disponían a pasar la línea de control de pasaportes de la terminal, provenientes de un país centroamericano al que supuestamente habían acudido tras ganar un premio en un sorteo patrocinado por una gran superficie comercial de la ciudad.
En ese momento iban acompañados de su hijo, menor de edad, práctica "habitual" en este tipo de contrabando con el fin de despertar las menores sospechas en los controles policiales a los que son sometidos.
A los detenidos se les intervino una cantidad de más de 6.300 gramos de cocaína, de elevado grado de pureza que podrían multiplicar varias veces el valor del producto una vez adulterado y puesto en circulación.
MULAS
Según las mismas fuentes, estas "mulas", además de mantener un nivel de vida "aparentemente discordante" con su teórica situación económica, realizaban viajes a países latinoamericanos con una frecuencia "inusual".
A los porteadores, momentos antes de su viaje de regreso y generalmente en el hotel en el que están hospedados, se les enrolla alrededor del cuerpo las bolsas con la sustancia estupefaciente envasada al vacío, que son apretadas fuertemente en distintas partes (abdomen, brazos, piernas) con el fin de disimular su volumen una vez que se colocan de nuevo las prendas de vestir.
De acuerdo con las citadas fuentes, esta forma de transporte de la droga comporta serios riesgos para la salud de los implicados, ya que a la severa compresión a la que se somete su sistema circulatorio al ser fajados se le añaden los problemas circulatorios habituales derivados del vuelo, como el conocido como síndrome de la clase turista.
La deficiente circulación en la sangre puede ser causa de dificultades respiratorias, taquicardia, dolores de pecho, pérdida del conocimiento o formar un coágulo de sangre en una vena, generalmente en las piernas.