Archivo - Uno de los linces liberados en el Cerrato Palentino en el marco del programa de la Junta de la reintroducción de la especie. - JCYL - Archivo
PALENCIA, 10 Ago. (EUROPA PRESS) -
Vuelvepiedras, el primer macho de lince ibérico liberado en el Cerrato Palentino, ha muerto ahogado en el Canal de Villalaco, zona considerada por la Junta de Castilla y León como una de las principales amenazas para esta especie.
Agentes medioambientales de la Junta, Guardia Civil y personal de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) procedieron durante la jornada del viernes a la recogida del cadáver de Vuelvepiedras, que se encontraba en el canal a la altura de la localidad palentina de Venta de Baños.
El animal, primer macho de la especie liberado en el Cerrato Palentino en el marco del programa de reintroducción, fue arrastrado hasta allí desde el punto de caída al canal, que de acuerdo con la información del seguimiento por satélite que portaba el ejemplar, se produjo entre las localidades de Villalaco y Cordovilla la Real.
La necropsia del ejemplar, realizada durante la tarde del viernes en el Centro de Recuperación de Animales Silvestres de la Junta de Castilla y León en Burgos, confirmaba como causa de la muerte el ahogamiento en canal de riego, al encontrarse en el interior de la tráquea contenido líquido verdoso, pulmones atelectásicos, sin apenas contenido de aire y uñas de las extremidades anteriores desgastadas, compatibles con el roce contra la pared del canal de riego.
Con la muerte de este lince en el canal de Villalaco, cuya titularidad y gestión corresponde a la CHD, desde la Junta se espera que este episodio sea un "punto de inflexión" en la adopción de medidas de prevención y evitación de daños medioambientales por parte de este organismo de Cuenca.
En este sentido, el Ejecutivo autonómico aguarda que se adopten las "medidas necesarias, del alcance y definición que correspondan, para evitar nuevas muertes tanto de linces como de otras especies de fauna silvestre".
La Junta ha aseverado, en un comunicado recogido por Europa Press, que ya ha planteado a la CHD estas peticiones en reuniones bilaterales, "incluso antes de aprobarse el proyecto de reintroducción en el Cerrato Palentino".
REINTRODUCCIÓN EN EL CERRATO PALENTINO
Con la muerte de Vuelvepiedras, son dos los ejemplares muertos en el Cerrato Palentino desde el inicio de la reintroducción de la especie en febrero de este año.
Hasta la fecha todos los linces liberados han permanecido en el área de reintroducción, con movimientos exploratorios iniciales, pero muy asentados al territorio, con áreas de campeo incluso inferiores a las 500 hectáreas para todos los ejemplares liberados, lo que da idea de la alta calidad del hábitat del Cerrato Palentino.
Hechos como la muerte de Vuelvepiedras por ahogamiento, o de Vouga por atropello hace apenas una semana, ponen de manifiesto la importancia de adoptar medidas de prevención ante sus dos principales causas de mortalidad identificadas de antemano en los estudios previos realizados por la Junta, y que se repiten en todas las zonas de presencia y nuevas áreas de reintroducción.
A pesar de la muerte de estos dos ejemplares, el proyecto de reintroducción en el Cerrato Palentino se desarrolla siguiendo los patrones comunes de otras áreas de reintroducción, con pérdidas de ejemplares por mortalidad o dispersión que se suelen producir fundamentalmente en los primeros años del proyecto.
Durante estos meses se ha ido avanzando también en la preparación de proyectos de mejora de hábitats en montes de utilidad pública, cotos de caza y fincas privadas, fundamentalmente creación de puntos de agua, como abrevaderos, charcas, bebederos y recuperación de manantiales.
En cuanto a medidas preventivas, ya se encuentra aprobado el proyecto de señalización de la P412 y P405. También se encuentra redactado y en tramitación el proyecto de vallado de un tramo de la P405, con el objetivo de reducir los riesgos por atropello.
Por último, en estos "momentos difíciles" para el proyecto, la Junta ha manifestado "el máximo agradecimiento" a todo el equipo que lo está llevando a cabo con "esfuerzo y dedicación", y que ha conseguido que el lince vuelva a Castilla y León y, en concreto, al Cerrato Palentino en este 2025.