VALLADOLID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
El nuevo radar Pegasus han denunciado por exceso de velocidad a 43 vehículos de los 453 controlados en Castilla y León (un 9,49 por ciento) entre el 27 de mayo y el 11 de junio, días en los que se han realizado 23 horas y 15 minutos de vuelo.
Así se ha puesto de manifiesto durante la Comisión Autonómica de Tráfico, Seguridad Vial y Movilidad Sostenible, que ha presidido el delegado del Gobierno en Castilla y León, Ramiro Ruiz Medrano. en la misma han participado los jefes provinciales de Tráfico, responsables de las demarcaciones de carreteras de Castilla y León, Oriental y Occidental, de la XII de la Guardia Civil, de las consejerías de Fomento y Sanidad de la Junta de Castilla y León y de la Federación Regional de Municipios y Provincias.
En la reunión se ha analizado la situación de las vías regionales y la evolución del tráfico en los últimos meses, con un balance de la accidentalidad realizado por la coordinadora regional de Tráfico y jefa provincial de Tráfico de Valladolid, Inmaculada Matías. Hasta el día 22 de este mes, y desde el inicio del año, se han producido en Castilla y León 35 accidentes mortales, frente a 42 registrados en 2013 en el mismo periodo de tiempo, con 42 fallecidos por 44 del año pasado.
Por otro lado, la Comisión ha recibido información de que la Dirección General de Tráfico en Castilla y León ha puesto en servicio el sistema Pegasus el día 27 de mayo, en una primera fase que ha durado hasta el 11 de junio.
Este equipo se suma a los dos ya existentes y cuyo objetivo es controlar la velocidad en las carreteras, principalmente las vías convencionales, que son las más peligrosas y donde se produce el mayor número de accidentes y de fallecidos.
El radar se incorpora a los dos helicópteros que la DGT tiene en la zona norte y noroeste de la península (Galicia, Castilla y León, Asturias y Cantabria), actuando desde las bases de Valladolid y La Coruña, aunque podrá sobrevolar otras carreteras de España cuando sea necesario.
Este nuevo radar, está dotado de un mecanismo y un software incluido en la cámara de vigilancia, de modo que capta la velocidad de los vehículos, además de poder detectar otras infracciones desde el aire (control del uso indebido del móvil en la conducción, correcto uso del cinturón de seguridad, etcétera).
BALANCE DE FUNCIONAMIENTO
Entre el 27 de mayo y el 11 de junio, se han realizado 23:15 horas de vuelo, controlando la velocidad de 453 vehículos, de los cuales se ha denunciado a 43 de sus conductores por circular a una velocidad superior a la permitida.
La velocidad media a la que circulaban los conductores de los vehículos denunciados fue de unos de 28 kilómetros por hora por encima a la estipulada en la vía. Aún así, la velocidad máxima detectada y denunciada en una autovía con límite de 120 fue de 171. En carreteras con límite de 100 se detectó un vehículo a 154 kilómetros por hora y en el caso de carreteras limitadas a 90 la velocidad máxima a la que fue interceptado un conductor fue de 116.
El mayor número de denuncias se ha producido en la A-6 y la N-601 (13 en cada caso), seguida de la A-62 (seis), han informado a Europa Press fuentes de la Delegación del gobierno.
Estos excesos de velocidad supondrán la pérdida de 26 puntos a los conductores denunciados y destaca que a dos de ellos el exceso de velocidad les supondrá la pérdida de cuatro puntos (infracción grave).
Los radares Pegasus constan de dos cámaras, una panorámica que facilita el seguimiento y captación de la velocidad y otra de detalle que tiene un objetivo que permite leer la matrícula del vehículo llegando incluso a poder detectar velocidades de hasta 360 kilómetros por hora.
Tal y como estipula la Ley, el nuevo radar ha sido verificado y homologado por el Centro Español de Metrología, organismo dependiente del Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
Este tipo de radares resultan operativos incluso a 300 metros de altura y a una distancia en línea recta con el vehículo controlado de un kilómetro tal y como se ha podido comprobar en las imágenes que periódicamente facilitamos a los medios. Si detecta un vehículo cuya velocidad sea superior a la permitida, comenzará las mediciones.
Se harán un total de tres mediciones, para determinar de manera certera por cuánto se sobrepasa el límite. El margen de error es igual que el de los radares fijos (en este caso sería de un máximo del 4 por ciento, por un 7 por ciento en los móviles).
Una vez obtenidas las imágenes en el Pegasus, se envían al aterrizar en tierra al Centro Estatal de Tratamiento de Denuncias Automatizadas, en León, que decide si tramitar o no la denuncia. La cámara de este helicóptero es "tan eficaz", que puede conseguir la imagen de un conductor hablando por su móvil.
