VALLADOLID, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha reconocido su satisfacción por la decisión del Partido Popular Europea de llevar al próximo pleno del Parlamento Europeo (PE) una propuesta de resolución para buscar una solución "al problema de convivencia del lobo", que en el caso de España afecta a las comunidades del noroeste.
Así lo ha explicado Suárez-Quiñones, quien en representación de Castilla y León y de las comunidades de Galicia, Asturias y Cantabria, se ha reunido con el presidente del Intergrupo sobre Biodiversidad, Caza y Mundo Rural del PE, Álvaro Amaro, con los portavoces de la Comisión de Agricultura y con la presidenta de la Comisión de Peticiones de la Eurocámara, Dolors Montserrat.
El consejero ha explicado que su intención es trasladar al PE la situación del noroeste de España "en relación al cambio de estatus del lobo" desde septiembre de 2021, "y que ha destrozado una situación de equilibrio" entre la presencia del lobo y la ganadería extensiva, un "equilibrio" que, como ha relatado, habían conseguido las comunidades autónomas "a través de una gestión responsable del lobo y el control de los ejemplares"
Se trata de mantener una población del lobo "indicada" en todo el noroeste español, "que ha ido creciendo", como así ha apuntado Suárez-Quiñones, quien ha precisado que esta población debe convivir "con una ganadería con daños razonables y compensados".
Pero según ha apuntado Juan Carlos Suárez-Quiñones, el Gobierno de España "por razones ideológicas y sin justificación ha cambiado el paso y ha ido más allá de lo que la normativa europea permite y prevé" y es que norte del río Duero el lobo pueda ser gestionado por las comunidades autónomas, a las que el Ejecutivo central "ha desposeído de esa capacidad" al incluir al lobo en la lista LESPRE.
Esto está provocando "un problema para la ganadería extensiva, hasta el punto de que se está empezando a abandonar esa ganadería", ha explicado Suárez-Quiñones, quien ha detallado que el aumento de los daños provocados por los lobos "hace imposible mantener las explotaciones", por lo que "se pone en peligro el medio rural y la biodiversidad".
"Se camina en sentido contrario a lo sensato y lógico. Europa está conduciendo en sentido contrario a como conduce España, ya que el Gobierno ha abandonado el marco normativo europeo, que busca lo contrario", ha precisado el consejero, quien ha indicado que Europa busca "la flexibilización porque entiende que existe un grave problema de coexistencia de los grandes carnívoros, como el lobo o el oso y por eso hay que buscar una solución".