PALENCIA, 3 Jun. (EUROPA PRESS) -
La marca francesa Renault tiene entre sus objetivos de política ambiental la reducción de la huella de carbono, los gases que producen el efecto invernadero emitidos en cada una de las etapas de la vida del automóvil, en un 20 por ciento hasta 2016.
Con motivo de la celebración el próximo 5 de junio del Día Mundial del Medio Ambiente, Renault ha querido informar acerca de las medidas en materia de medio ambiente que se llevan a cabo en la factoría que posee en la localidad palentina de Villamuriel de Cerrato y más concretamente, dar a conocer su central térmica.
Según ha explicado Jorge Peña, responsable de Medio Ambiente de la fábrica, uno de los principales objetivos de la marca gala es "reducir la huella de carbono", ya que en la actualidad se emiten "31,9 toneladas de CO2 de media durante todo el ciclo de vida de un coche" y el objetivo es reducirla en 2013 en 10 por ciento y llegar a "una emisión de 25,8 toneladas en 2016".
Para ello, Renault cuenta con una política ambiental desde 1995 cuyo objetivo es "reducir el impacto ambiental en la fabricación de coches". Una política que se ha visto completada por la creación en 2007 del distintivo 'Renault eco'.
Esta señal, que supone la creación de vehículos económicos y ecológicos, tiene que cumplir una serie de requisitos: fabricarse en una planta con la certificación ISO 14001; emitir menos de 120 gramos de CO2 por kilómetros y contener un mínimo de un 7 por ciento de plásticos reciclados y ser reciclable en un 95 por ciento de su masa al final de su vida.
CENTRAL TÉRMICA
Entre las instalaciones medioambientales de la fábrica palentina, destaca su central térmica, "el corazón energético de la factoría" como así lo ha apuntado Jesús Urbaneja, responsable de Energía y Fluidos, donde se controla "la energía y los fluidos que la fábrica necesita para funcionar".
Las últimas adquisiciones para mejorar el rendimiento de la factoría han sido un aerorefrigerador y un recuperador de humos. El primero, "refrigera la soldadura del coche y los compresores", ya que cuando la temperatura exterior es menor de 15 grados, se llega a consumir "una sexta parte menos de energía" de lo que se consumía antes. Mientras que el recuperador de humos emplea los vapores de salida de la chimenea de la Central para calentar el aire de combustión.
AHORRO
La factoría de la marca del rombo ha llevado a cabo en 2010 un total de 150 líneas de acción a través de su Comité de Energía y ha invertido 1,5 millones de euros en ahorro energético, apostando también por las energías renovables, con ocho paneles solares que ahorran en la producción de agua caliente en vestuarios y servicios, al permanecer apagas las calderas desde mayo y hasta octubre.
Estas acciones han permitido ahorrar 15.600 Megavatios a la hora, lo que equivale a 485.000 euros. Las principales inversiones se han destinado al proceso de Pintura, Montaje y Embutición, así como a la Central Térmica.
Esta acción se complementa con la sustitución del antiguo alumbrado por ocho proyectores LED en prueba, lo que hace que se consuma un 50 por ciento menos que con la anterior iluminación.
