Tráfico instala un radar fijo y otro móvil para reducir la siniestralidad en las curvas de Fuentemilanos (Segovia)

SEGOVIA 31 May. (EUROPA PRESS) -

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha un radar fijo y otro móvil en la N-110 (Soria-Plasencia), en el entorno de las curvas de Fuentemilanos (Segovia), con el fin de reducir la siniestralidad en este tramo, uno de los puntos más conflictivos de la red viaria segoviana.

Según informan a Europa Press fuentes de la Subdelegación del Gobierno, se ha instalado un radar fijo en el punto kilométrico 208,200, que se encuentra conectado con el Centro de Tratamiento de Denuncias de León.

Además, se ha colocado un radar móvil, operado por la Guardia Civil de Tráfico, entre los puntos kilométricos 203,300 y 202,650, en las plataformas laterales que han sido habilitadas por la Unidad de Carreteras del Ministerio de Fomento.

La subdelegada del Gobierno, Pilar Sanz, ha señalado que el objetivo es que estos radares tengan un efecto disuasorio en los conductores para evitar que circulen con una velocidad inadecuada y ha recomendado de nuevo el cumplimiento de las normas de tráfico para evitar accidentes.

Según indicó recientemente, la velocidad inadecuada, las distracciones al volante o la somnolencia fueron las causas de cinco de los siete accidentes de tráfico mortales registrados en la provincia de Segovia este año, que se saldaron con ocho personas fallecidas.

Sanz ha recordado que el Ministerio de Fomento trabaja además en una solución temporal e inmediata, entre las técnicamente posibles para reducir el riesgo de accidentes en ese tramo, mientras se hace efectiva la solución definitiva con el cambio de trazado de las curvas de Fuentemilanos.