BARCELONA, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
Un total de 8.591,78 hectáreas de vegetación ardió este verano en Catalunya, 3.001,97 de superficie forestal y 5.589,81 de agrícola, en 407 incendios, según informó hoy la Conselleria de Medio Ambiente en un comunicado.
La campaña del verano se ha caracterizado por ser "muy dura en episodios de alto riesgo" de incendios, en la que se quemaron mayoritariamente zonas agrícolas, especialmente campos de cereal a principios de junio.
Según Medio Ambiente, la temporada se ha definido por su "dureza meteorológica", agravada por vientos cálidos del sur y vientos de Poniente entre el 21 y el 30 de julio. En la segunda quincena de agosto se tuvo que impedir dos veces el acceso a algunos espacios naturales.
Por demarcaciones, en Lleida fue donde más hectáreas se quemaron: 5.145,15 hectáreas no forestales y 1.594,94 forestales; seguida de Terres de l'Ebre, 985,45 hectáreas forestales y 161,97 no forestales, y Barcelona, con 238,50 hectáreas forestales y 213,65 no forestales. La que menos, Girona, con 45,97 hectáreas forestales y 26,69 no forestales.
El incendio más destacado fue el del parque natural de Els Ports, en Horta de Sant Joan (Tarragona), el día 20 de julio, en el que cinco bomberos murieron en las tareas de extinción al quedar atrapados por las llamas, uno de ellos días después en el hospital, y otro quedó herido grave.
Controlar el fuego fue muy complicado debido a la orografía del parque, con zonas escarpadas y de difícil acceso para las dotaciones terrestres y por los continuos cambios de viento, que impidieron en varias ocasiones a los medios aéreos sobrevolar la zona.
Según datos de los Bomberos de la Generalitat, el incendio movilizó a 120 dotaciones terrestres y 30 medios aéreos, que durante una semana estuvieron trabajando los distintos flancos del fuego, que acabó calcinando 1.140 hectáreas y que no se dio por extinguido definitivamente hasta ayer por la noche.
Según las investigaciones de los Agentes Rurales, la causa fue un rayo que cayó en un árbol y que durante varios días fue creando unas brasas que encontraron el clima apropiado para crecer.
Por el número de hectáreas quemadas, el fuego más importante de este julio fue el de Agramunt (Lleida), el día 17, en el que además murió un anciano al caer por un terraplén. Ardieron en total 5.100 hectáreas, el 73 por ciento agrícola y el 27 por ciento restante, forestal, y tuvieron que desplazar a 80 dotaciones terrestres y 20 medios aéreos.
PROHÍBEN USAR MAQUINARIA AGRÍCOLA
Los primeros días de julio, varios incendios agrícolas obligaron a la Conselleria de Interior a prohibir el uso de maquinaria agrícola durante dos días, entre las 14 y las 17 horas, en las comarcas de la Noguera, Urgell, Segrià, Segarra, Solsonès, Garrigues y Bages.
Los incendios afectaron a las poblaciones leridanas de Plans de Sió --240 hectáreas quemadas--, Oliola --111 hectáreas quemadas--, Les Oluges --188 hectáreas quemadas--, Nalec --30 hectáreas-- y Vilanova de l'Aguda --43 hectáreas--, así como el de Cabanabona --169,81 hectáreas quemadas, la mayoría de cultivos--.
