El australiano Markus Zusak da voz a la muerte en la historia ambientada en el nazismo 'La ladrona de libros'

Actualizado: domingo, 30 septiembre 2007 12:18

BARCELONA, 30 Sep. (EUROPA PRESS) -

El autor australiano Markus Zusak da voz a la muerte para narrar 'La ladrona de libros' (Lumen/La Campana), la historia de una niña que en la época nazi se dedica a robar libros para refugiarse de los horrores que comportó la Segunda Guerra Mundial en Alemania.

Liesel es acogida en la zona más pobre de la Alemania nazi por un veterano de la Primera Guerra Mundial que ahora es pintor de brocha gorda y acordeonista a ratos libres, y enseña a la niña los rudimentos de la lectura.

Cuando las leyes raciales se imponen de forma más cruel en Alemania, la familia esconde en su sótano a Rudy, un joven judío que animará a la pequeña a seguir leyendo.

Zusak empezó a escribir 200 páginas con la muerte como narradora pero el relato no acabó de funcionar. "Su voz era un cliché, un personaje sádico que disfrutaba llevándose las almas". Así que decidió dotarla de una voz vulnerable y con dolor interior.

"¿Qué pasa si la muerte tiene miedo de nosotros? Es una ironía, pero está en los momentos más trágicos. Quería que la muerte fuese casi humana quizá un poco desviada", explicó el autor, en una entrevista concedida a Europa Press.

Es inevitable hablar de la muerte cuando se relata una historia situada en la Segunda Guerra Mundial. "La guerra y la muerte van de la mano como si fueran amigos íntimos. Me pareció una buena narradora", apuntó.

Sin embargo, Zusak es consciente que en la sociedad actual la muerte suscita cierto rechazo. "La muerte es una tabú, algo en el que no nos gusta pensar, de lo que no hablamos, nosotros mismos hemos generado el miedo. Por eso quería presentarla con ternura".

LA EXPERIENCIA DE SUS PADRES.

Zusak nació en Sidney pero es hijo de un alemán y una austríaca, que emigraron a Australia después de la Segunda Guerra Mundial por lo que su familia ha vivido en primera persona lo ocurrido durante el holocausto judío.

"Mis padres son excelentes narradores a la hora de contar con lirismo e incluso de forma cómica los hechos trágicos que comportó la guerra", explicó Zusak a la vez que aseguró aborrecer el trabajo de documentación necesario para escribir la novela.

En Estados Unidos la novela se coló en la lista de los libros más vendidos de 'The New York Times' a la semana de su publicación. La primera edición, con 40.000 ejemplares, se agotó en pocos días, y la editorial ya puso en marcha la segunda edición con 70.000 copias.

"Pensé que no me iba a leer nadie. Al tener esta actitud empecé a escribir lo que quería y he disfrutado del libro. Me sorprende cuando la gente me felicita, no me lo podía imaginar", dijo el autor respecto al éxito de su obra.