AVE.- La junta constructora de la Sagrada Familia insiste en que irá a los tribunales si no se modifica el proyecto

Actualizado: martes, 17 julio 2007 12:49

BARCELONA, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la junta constructora de la Sagrada Familia, Joan Rigol, insistió hoy en que recurrirá a los tribunales si no se modifica el proyecto del túnel del AVE por el Eixample, y que pasará bajo la calle Mallorca, justo al lado del templo del arquitecto modernista Antoni Gaudí.

"Si no hay un cambio, iremos al juez para que dictamine si hay riesgo real", aseguró Rigol, quien concretó que el plazo para acudir a los tribunales expira "el 2 o 3 de octubre". En relación a las alegaciones presentadas por la junta constructora del templo, Rigol dijo que "aún no hay respuesta".

SEGUIMIENTO "MUY CUIDADOSO"

Rigol hizo estas declaraciones después de asistir a un encuentro que mantuvo en el Ayuntamiento de Barcelona con el teniente de alcalde de Urbanismo e Infraestructuras, el socialista Ramon García Bragado. En esta reunión, ambas partes apostaron por hacer un seguimiento de la evolución de las obras cuando estas empiecen, a principios del próximo año.

"El Ayuntamiento manifiesta su máximo interés en hacer un seguimiento muy cuidadoso de las obras con los ciudadanos", aseguró García Bragado, quien precisó que "con la Sagrada Familia habrá una relación directa bilateral" durante este proceso.

Ambas partes concretaron que, durante la construcción del túnel, habrá una "relación fluida" entre ellas, en palabras de García Bragado.

"Nosotros estamos abiertos a cualquier proyecto que implique una mayor seguridad", precisó Rigol, quien concretó que la junta constructora no se pronunciará sobre por donde tendría que trazar el AVE. "Este no es nuestro trabajo", concretó.

"RIESGO"

Rigol recordó que los informes técnicos que encargó la junta constructora a varios ingenieros ponían de manifiesto el "riesgo" que supondría el túnel para el templo. "El túnel por Mallorca es un elemento que nos intranquiliza", añadió.

El proyecto del Ministerio de Fomento incluye la construcción de un muro de hormigón de 40 metros de profundidad entre el túnel y el templo, con la finalidad de preservar la Sagrada Familia de las vibraciones ocasionadas por el paso de los ferrocarriles. Algo que, según Rigol, "no es suficiente" para preservar el templo ya que "el subsuelo es muy complejo".

"La Sagrada Familia no tiene una arquitectura como la del gótico, no hay contrafuertes ni claves de bóveda", recordó Rigol, y en consecuencia, ello hace frágil la estructura del templo. "Cualquier movimiento es muy sensible en la arquitectura gaudiniana", sentenció.

TRATO "SINGULAR"

Al ser preguntado sobre si en la reunión se abordó el hecho de que la Sagrada Familia se construye sin disponer de la correspondiente licencia municipal de obras, García Bragado concretó que el templo de Gaudí es "una iniciativa extremadamente singular y hay que tratarla de manera singular".

Lo que también abordaron Rigol y García Bragado fue la "conveniencia" de iniciar las inspecciones necesarias en el templo, que también se realizarán en el resto de edificios situados en las vías por las cuales discurrirá el túnel del tren de alta velocidad.