BARCELONA, 26 May. (EUROPA PRESS) -
Los bebés de un año de edad son capaces de predecir acontecimientos futuros de forma "racional y precisa", incluso antes de empezar a hablar, según un estudio coordinado por la Universitat Pompeu Fabra (UPF) que pone de manifiesto la capacidad de respuesta de los menores ante estímulos complejos.
En declaraciones a Europa Press, el coordinador de la investigación, Luca Bonatti, ha precisado que el estudio demuestra que la capacidad humana de "inventar soluciones a problemas nuevos sin saber nada del pasado", en realidad es una característica que aparece en una edad muy temprana.
Hasta la fecha se conocía que los bebés son capaces de comprender movimientos físicos y contar cantidades de objetos, entre otras habilidades cognitivas, y ahora Bonatti defiende que ha quedado demostrado que los pequeños también son capaces de "corregir una idea preconcebida mirando lo que pasa", es decir, modifican las expectativas de lo que puede suceder con el resultado de la experiencia.
La investigación, que publica la revista 'Science', ha medido el tiempo de respuesta que utilizaron los bebés a un estímulo visual que actuaba como indicador de sorpresa, y que se basa en que un bebé acostumbra a mirar con mayor atención cuando descubre algo nuevo que le sorprende, y durante menos cuando lo que sucede es algo que ya conoce.
El estudio ha estado liderado por Bonatti, investigador Icrea del Departamento de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones de la UPF, y en él también han participado el Centro de Desarrollo Cognitivo de la Academia de Ciencias de Budapest (Hungría), el MIT de la Universidad de California (EE.UU.), la Universidad de Venezia (Italia) y el CNRS de la Universidad de Aix-Marseille (Francia).
BOMBOS DE LOTERÍA
En concreto, los investigadores situaron cuatro objetos parecidos en movimiento en el interior de un bombo de lotería virtual, y se expuso a los pequeños a su visionado, en el que los diferentes objetos --tres amarillos y uno azul-- salían al exterior siguiendo una cierta lógica probabilística.
Los bebés, unos 150 en total, elaboraron expectativas precisas sobre el comportamiento de estos objetos y por tanto reflejaron poseer la capacidad de elaborar un "razonamiento puro" que no se basaba en experiencias ni conocimientos previos.
Así pues, éstos fueron capaces de combinar distintas informaciones para dar respuesta a un problema, y entendieron que lo lógico era que saliera primero del bombo el objeto que estaba más cercano independientemente de su color, aún sabiendo que tenía más posibilidades de salir un objeto amarillo antes que azul --por la proporción de tres a uno--, entre otros aspectos.
De este modo, los bebés siguen unos patrones de comportamiento racional que no se basan en ninguna experiencia similar, y por lo tanto son capaces de determinar qué sucederá en un futuro próximo a través de un comportamiento racional.
