Uno de cada tres conductores muertos en accidente de tráfico en Catalunya dio positivo en alcoholemia

Uno de cada tres conductores que murieron en 2009 en accidente de tráfico en Catalunya dio positivo en consumo de alcohol, y este porcentaje se eleva hasta un 40% si se trata de la mezcla de alcohol y drogas, según el anuario estadístico de accidentes en Catalunya 2009 presentado hoy.

En rueda de prensa, el conseller de Interior, Joan Saura, admitió que existe "un problema" ya que, además, en los 17.789 accidentes de tráfico testados, un 11,7% de los conductores dieron positivo, cuando en 2008 fueron 11,3% de 19.243 accidentes.

En peatones, el 28,6% de los atropellados dieron positivo en consumo de alcohol y el 35,8% en consumo de alcohol y drogas.

El director del Servei Català de Trànsit (SCT), Josep Pérez Moya, aseguró que se trata de "indicadores suficientemente potentes para reflexionar" y Saura avanzó que están pensando en introducir medidas "más contundentes y específicas" contra el alcohol, aunque no las concretó.

Así, el conseller quiso lanzar un "grito de atención" porque "más de 160 personas que murieron tenían exceso de alcohol", y aunque no se ha analizado si fueron los causantes de los siniestros, no descartó que así sea en muchos de los casos. No obstante, dijo que ha aumentado en la población la cultura de "menos velocidad" y más "prudencia".

Saura explicó que están trabajando para tener listo antes de final de año el Plan de Seguridad Vial 2011-2013, en el que se centrarán en hacer frente a los atropellos, los choques frontales y salidas de vía, así como a la velocidad inadecuada, las distracciones y el alcohol.

Puntualizó que seguirán con los controles de alcoholemia, ya que es un instrumento que sirve para controlar que no aumente el consumo, y concretó que en 2009 se hicieron más de 600.000, un 12% más que en 2008.

Pérez Moya explicó que han detectado que los jóvenes tienen actualmente una actitud "más preventiva", aunque admitió que "hay un factor generacional cultural que hace que la gente de más de 35 años tiene más costumbre de ingesta en las comidas", lo que puede tener una "clara influencia" en los positivos en el conjunto del territorio.

Respecto a la velocidad, en 2009 aumentaron un 6,5% los vehículos implicados en accidentes que cometieron una infracción de velocidad inadecuada, respecto a 2008, si bien disminuyeron en un 16,5% los vehículos que cometieron una infracción por superar el límite de velocidad establecido.

En este sentido, el director de Trànsit recalcó que el descenso de la velocidad media en las carreteras catalanas de 99 kilómetros por hora a 89 tiene una "incidencia muy directa" en el descenso de la siniestralidad.