Carod defiende que el Parlament proclame la independencia si el Estado rechaza un referéndum

BARCELONA, 7 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente de ERC y vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, reivindica en su libro '2014' que, si el Estado rechazara un referéndum de autodeterminación que resulte favorable a la independencia, sólo quedaría la vía de la proclamación unilateral del Parlament.

En rueda de prensa para presentar '2014' --fecha que reivindica como óptima para un referéndum de autodeterminación--, defendió que "la decisión (de independencia de Catalunya) debe ser tomada por una mayoría social-democrática del Parlament, que, si además se ve reforzada por un referéndum, aún mejor".

Para Carod, si el Estado no acepta que el resultado de un referéndum sea favorable a la independencia, "evidentemente no habría más opción que atender sólo a la decisión del Parlament", lo cual considera suficiente para recibir el reconocimiento internacional.

El consenso parlamentario también es necesario, a su juicio, para fijar la pregunta de un eventual referéndum: "Lo que es necesario es una mayoría parlamentaria para formular la misma pregunta, aunque es posible que no todos los partidos que formulen la misma pregunta coincidan en la respuesta".

Carod explicó que su nuevo libro aborda "la ilusión de construir un Estado", sabiendo que "por primera vez se pueden fusionar dos grandes intereses colectivos".

Se refirió así a la voluntad del catalanismo "clásico, lingüístico, cultural, histórico y emblemático", que ve Catalunya como una nación que tiene derecho a ser Estado "por identidad"; y al "nuevo soberanismo, que puede que no lo sepa, que a menudo se expresa en castellano, que dice 'Somos una sociedad, seamos o no nación', que tiene necesidad, para un mejor bienestar, de tener Estado".

Carod sostiene que de la alianza de ambos intereses colectivos surge una "nueva identidad nacional catalana", fruto de la fusión de la "identidad-herencia o identidad-cultural" y la "identidad cívica o identidad elección, que uno escoge que también quiere tener". Para él, Catalunya es hoy "tierra de identidades complejas", por la llegada masiva de inmigración de los últimos años.

"Lengua y de patria catalana tenemos unos cuantos; bolsillo y ganas de vivir mejor tenemos todos", dijo una vez más Carod.

También dijo que su libro no es nacionalista, sino "nacional", y destacó que en sus 308 páginas sólo alude a "nacionalismo" para criticar y "hablar mal" del nacionalismo español, que "se paga con los Presupuestos del Estado".

Opinó que la identidad catalana sólo puede "renovarse o morir", y matizó que "morir, en caso de identidad, significa ser asimilado por otra identidad", la española. "El proyecto nacional catalán no está acabado, y propongo que no se acabe nunca porque esto es lo que le da vitalidad", subrayó.

Carod cree que esa vitalidad se debe a que Catalunya está en permanente construcción, lo cual "permite a la nación catalana, que hace tres siglos que no tiene Estado propio, que incorpore a su proyecto nacional a gente llegada de otros países, culturas y lenguas". "Catalunya es otra, pero continúa siendo Catalunya", insistió.

'2014' es un libro que habla del futuro, ya que Carod es consciente de que la independencia "no se puede conseguir sólo con los diputados independentistas que hay hoy en el Parlament" y de que "estos procesos suelen ser pluripartidistas".

SEPARACIÓN AMISTOSA.

Se mostró partidario de una separación cordial de España, también en el repartto patrimonial: "Quiero llegar a un acuerdo negociado, amistoso con España", con la que "habrá muchos temas en común a defender juntos en la Unión Europea; pero cada uno en su casa", y puso como ejemplo la separación de Checoslovaquia.

Fue contundente al afirmar que la independencia de Catalunya sólo puede llegar por la vía democrática y pacífica, y abogó por el "independentismo provisional": "Existe un cierto independentismo resignado a ser independentista toda la vida, y yo soy independentista provisional, porque lo que quiero es ser independiente".

ZAPATERO Y RAJOY, INDEPENDENTISTAS.

Carod opinó que "independentista, independentista, en cuanto a actitud, lo es todo el mundo: José Luis Rodríguez Zapatero, Mariano Rajoy, Nicolas Sarkozy, Segolene Royal, son independentistas, son favorables al mantenimiento del estatus independiente de la República Francesa y del Reino de España, aunque ellos ya están en la fase de ser independientes".

Y alertó al independentismo catalán "resignado" de que el independentismo sólo interesa a los independentistas, mientras que la independencia "puede interesar a todo el mundo". Por eso, defendió un soberanismo abierto, no sectario, y pluripartidista.

Según el presidente saliente de ERC, el libro provocará "incomodidad" entre los catalanes "nacionalmente más templados", mientras que los militantes de ERC "agradecerán que el que hoy es su presidente haya abierto camino escribiendo un libro que es una hoja de ruta de renovación de la identidad, presentándola cívica, abierta e inclusiva" además del "camino hacia la independencia".

Carod hizo un agradecimiento irónico en público al presidente del PP de Catalunya, Daniel Sirera, por la "propaganda indirecta" que, con sus críticas, hace del libro. Es más, le reclamó que sea "más explicito": que explique el contenido del libro y mencione más a menudo el título, que hizo por encargo de la editorial Mina.