Catalunya registra un año hidrológico seco a excepción del verano

BARCELONA 2 Oct. (EUROPA PRESS) -

El año hidrológico 2013-2014 en Catalunya, que transcurre del 1 de octubre de 2013 a la misma fecha de 2014, ha constado que los primeros nueve meses del año han sido secos, mientras que "importantes precipitaciones" han protagonizado el último trimestre --de julio a septiembre--.

Los primeros nueve meses han sido secos, especialmente en el norte de Catalunya, mientras que de julio a septiembre han sido húmedos, lo que ha permitido ahorrar el consumo de agua embalsada, ha informado este jueves la Conselleria de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat en un comunicado.

En conjunto, el año hidrológico ha satisfecho todas las demandas de agua con las reservas en los embalses en situación normal --en el caso del de Boadella-- o abundante --el resto de embalses de las cuencas internas--.

En este sentido, el año empezó con 611 hectómetros cúbicos de reservas --el 88% de la capacidad-- y ha acabado con 586 hectómetros cúbicos --el 84% de la capacidad--.

Los tres primeros meses secos se notaron especialmente en la cuenca del río Muga, donde la escasez de precipitaciones en los meses previos a la campaña de riego produjo descensos importantes de las reservas.

A partir de julio, el ahorro en el riego y la buena coordinación entre regantes permitió aprovechar cualquier aportación de lluvia en la zona que se puede regar con el fin de reducir inmediatamente los desembalses, lo que hizo posible un cambio de tendencia, con un ahorro del 38%.

Los regadíos del Ter y del Llobregat han aprovechado la lluvia del verano para ahorrar consumo de agua embalsada en un 20% respecto a los volúmenes asignados, un 21% y un 19%, respectivamente.

Las situaciones frecuentes de lluvias, que han mejorado la disponibilidad de agua y han llenado algunos embalses, se han producido por la presencia estática de una potente zona de bajas presiones en el noreste de Galicia y por un anticiclón de bloqueo en el centro-norte de Europa.

El movimiento hacia el sur de esta zona de bajas presiones ha conllevado una "situación de inestabilidad" que ha provocado intensas lluvias en el litoral y el prelitoral, lo que ha hecho crecer algunos ríos de forma significativa y ha aumentado en ocho hectómetros cúbicos las cuencas internas.