L'HOSPITALET DE LLOBREGAT (BARCELONA), 23 (EUROPA PRESS)
Centenares de enfermeras se concentraron hoy a las puertas de varios hospitales y Centros de Atención Primaria (CAP) de las cuatro provincias catalanas, en respuesta a la convocatoria unitaria del sindicato de enfermería Satse para reivindicar el "prestigio" de su profesión tras la muerte del bebé Rayán en Madrid.
Además de las más de cien enfermeras concentradas en el Hospital de Bellvitge (Barcelona), donde se realizó la protesta principal de la jornada en Catalunya, la convocatoria fue seguida también por más de 80 profesionales en el Hospital Joan XXIII de Tarragona, otras 50 en el Hospital Arnau de Vilanova de Lleida y unas 90 en el Hospital Germans Josep Trueta de Girona, informaron fuentes de Satse a Europa Press.
La concentración se realizó para criticar lo que Satse entiende como "intentos de desprestigio" de la profesión, a raíz de la muerte del bebé Rayán en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid, después que una enfermera le suministrara leche por vía intravenosa y no por la sonda nasogástrica, lo que colapsó su organismo. La madre del bebé había fallecido previamente afectada por el virus de la gripe A.
El colectivo, en su protesta de Bellvitge, criticó las "precarias" condiciones laborales en las que trabaja y reclamó un incremento de las plantillas y planes de acogida de nuevos profesionales que se incorporan en un centro.
Durante la concentración se leyó un manifiesto en el que los profesionales de enfermería expresaron su pesar por la muerte de Rayán y mostraron su "apoyo" a la enfermera afectada por estos hechos. El sindicato calificó de "graves" las declaraciones que el gerente del Hospital Gregorio Marañón, Antonio Barba, realizó a raíz de este caso y reclamó una rectificación pública o su dimisión.
La secretaria de Satse en Catalunya, Montserrat Peña, criticó el "trato" que están recibiendo los profesionales de enfermería por parte de las administraciones y agradeció el apoyo de los usuarios y de diferentes organizaciones "ya que por un hecho en concreto no se puede poner en cuestión la profesión".
En su manifiesto, el sindicato detalló las carencias que afectan al servicio de enfermería, como son unas plantillas deficitarias, la falta de sustituciones en caso de bajas o de vacaciones y la obligación de realizar el trabajo en diferentes servicios o unidades en un mismo turno. Estas circunstancias "no repercuten en el usuario ya que, antes de que pase, preferimos cargar con una sobrecarga de trabajo", afirmó Peña.
Los profesionales de enfermería exigieron al Ministerio de Sanidad del Gobierno un plan para adecuar las plantillas a los niveles europeos y que se ponga fin a la rotación "forzada" de profesionales entre diferentes unidades. Además, plantearon la necesidad de protocolos de acogida y tutela de los nuevos profesionales que se incorporan en un centro o en una unidad.