BARCELONA, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha aprobado crear un nuevo juzgado de instrucción en servicio de guardia para enjuiciar en exclusiva delitos leves en Barcelona, especialmente para abordar la problemática de los hurtos, que han aumentado este año un 19%, según una nota interna recogida por Europa Press.
El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) y la Conselleria de Justicia de la Generalitat deberán concretar cómo se pone en marcha este juzgado, que según el acuerdo del Consejo será efectivo el 1 de enero de 2019, según publica este viernes 'La Vanguardia'.
Según han indicado a Europa Press fuentes judiciales, para que este juzgado sea una realidad la Generalitat deberá aportar la dotación económica correspondiente, un tema que se abordará en la reunión que Conselleria y TSJC mantendrán el 17 de diciembre.
La Comisión Permanente del Consejo aprobó crear este nuevo juzgado, destinado en exclusiva a enjuiciar delitos leves --en su mayoría hurtos--, el 22 de noviembre, y pidió comunicarlo al TSJC, a la Fiscalía Superior. y de Barcelona, a la jueza decana de Barcelona, al Ministerio de Justicia, a la Generalitat, al Colegio de la Abogacía de Barcelona (Icab) y al Colegio de Procuradores de Barcelona.
JUEZ DECANA
La juez decana de Barcelona, Mercè Caso, ya advirtió antes del verano de que los juicios por delitos leves inmediatos, principalmente por hurtos, se estaban retrasando hasta ocho meses en la capital catalana pese a que la ley fija un plazo de ocho días para señalarlos, y lamentó que existía el riesgo de que muchos prescribieran.
Caso explicó entonces que cada día se celebran una media de 30 juicios por estos delitos, pero que no es posible absorber el gran número de procedimientos que llegan a los juzgados, y pidió crear un nuevo juzgado de guardia que ayudara a mitigar la situación.
La problemática de los hurtos en Barcelona se agravó tras la sentencia del Tribunal Supremo que consideró que no era posible perseguir como delito menos grave de hurto cuando un mismo autor había sido condenado por tres o más sentencias firmes, como antes sí se hacía.
Eso implicó que los delincuentes que se dedican al hurto de forma 'profesional' ya no pueden ver agravada su situación por ser habituales, al ser solo juzgados por cada delito por separado.
