CGT considera que las obras de la L9 del Metro de Barcelona comportan riesgos de seguridad para trabajadores y vecinos

BARCELONA 5 Jun. (EUROPA PRESS) -

La CGT consideró hoy que las obras de la Línea 9 del Metro de Barcelona, adjudicadas a una Unión Temporal de Empresas (UTE) de cinco compañías, comportan "riesgos" de seguridad para los trabajadores, y pidió más servicios de atención médica, y también para los vecinos del trayecto, al estar algunos edificios "encima del túnel".

En una rueda de prensa con tres trabajadores, que explicaron que fueron despedidos, uno de ellos, Manuel Palacios, advirtió de los "problemas de seguridad" de la construcción de la Línea 9 al "no tener un responsable de seguridad" para dirigir al personal.

Además, según otro ex trabajador, Aureliano Guemez, "sólo hay un ATS --Auxiliar de Transporte Sanitario-- que está ocho horas al día" para las obras, donde dijo que trabajan al menos 400 empleados, y pidió un doctor para asistir a los operarios en caso de accidente. En 2004 se contabilizaron 88 accidentes --todos leves excepto uno grave y otro mortal-- y, en 2005, 61.

Palacios aseguró que "en muchos casos no hay un plan de emergencia" aunque se producían "conatos de incendio", según dijo. Mantuvo que no se respetan los tiempos marcados de construcción, lo que ejemplificó con que si es necesario dejar reposar el mortero durante cinco horas, "se deja cuatro y media", según afirmó.

"Siempre prevalece la producción sobre la seguridad", lamentaron, y otro ex trabajador, Aurelio Ortega, recordó que las obras de perforación del túnel a la altura de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) tuvieron que pararlas "tres o cuatro meses para inyectar hormigón" en un punto donde encontraron "una veta de agua".

También se refirieron a la explosión de gas que en la madrugada del 12 de enero de 2006 provocó dos muertos y una veintena de heridos en el barrio de Fondo de Santa Coloma, y consideraron que se produjo a raíz de "las vibraciones" de las obras del Metro.

Los tres empleados estuvieron acompañados del ingeniero Francesc Menén, que los asesora en materia sociolaboral. Está recopilando la documentación sobre la situación de los trabajadores y anunció que estarían dispuestos a testificar sobre la explosión, ya que cuentan "con documentación y estaban allí" cuando sucedió.