El Obispado asegura que hay riesgo para la seguridad "si no hay una intervención inmediata"
LLEIDA, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Cabildo catedralicio de Lleida instalará los próximos días una red de protección en los tejados de la Catedral Nova para evitar el desprendimiento de elementos de las cúpulas de los contrafuertes, para garantizar la seguridad de los peatones de su entorno ante posibles accidentes y para evitar más daños ocasionados por las cigüeñas que anidan en el edificio.
Ha obtenido esta semana la licencia municipal de obras del Ayuntamiento de Lleida para la instalación de una red protectora para evitar el desprendimiento de elementos de las cúpulas para preservarla de la acción nociva de los excrementos de las aves, ha informado este jueves el Obispado.
Las obras consisten en la instalación de un sistema protector con redes de hilado sintético para garantizar la seguridad, y tendrán un coste aproximado de 20.000 euros.
"A pesar de que afortunadamente hasta ahora no se ha producido ningún daño personal, existe un riesgo permanente para la seguridad de los peatones, si no hay una intervención inmediata", ha asegurado el Obispado.
La Conselleria de Territorio y Sostenibilidad encargó al Departamento de Cristalografía y Mineralogía de la Universidad de Barcelona (UB) un estudio sobre posibles daños producidos en el monumento debido a la antigüedad de la piedra, la contaminación y las cigüeñas.
Este informe destaca que la instalación de los nidos en las cornisas y remates de las torres incrementa considerablemente el peso que deben soportar estos elementos y que por ello "en las cubiertas la presencia de cigüeñas facilita el desprendimiento de piezas o fragmentos con el consiguiente riesgo para los peatones".
A raíz de este estudio, según el Obispado, la Conselleria de Cultura emitió un informe en enero, que determina que la estancia de aves en las cubiertas es incompatible con su preservación y con la seguridad de las personas en su entorno.
Con este argumento, señala el Obispado, la Conselleria de Cultura aconseja "actuar lo antes posible con soluciones que impiden esta estancia, que no supongan afectación, ni para las aves ni para las personas, al tiempo que garanticen la conservación del monumento".
