BARCELONA, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un comercial externo de Letter Graphic, Salvador Oller, negó hoy haber emitido facturas falsas y haber financiado a partidos políticos desviando fondos del Palau de la Música, y declinó responder a las preguntas de los representantes de los grupos en la comisión de investigación para aclarar su elevado facturación al Palau por trabajos de buzoneo.
En concreto, Letter Graphic y New Letter, que comparten administrador, facturaron 952.000 euros del Palau entre 20007 y 2009 por trabajos que consistían en estudios de mercado para la captación de nuevos socios.
Emulando la posición adoptada por los representantes de estas empresas --el de New Letter también se negó a declarar y el de Letter Graphic alegó tener depresión para no comparecer--, Oller se limitó a leer una breve intervención antes del inicio de las preguntas de los diputados.
Además de dejar claro que nunca ha sido empleado del Palau ni de CDC, recordó que en 2005 contactó con el ex director administrativo Jordi Montull para realizar un trabajo y un estudio de campo para captar a nuevos donantes e incrementar el flujo de visitantes al recinto.
Según explicó, el trabajo dio como resultado un fichero de 100.000 registros y se inició una campaña de comunicación directa para conseguirlo.
Aclarado esto, Oller quiso dejar claro que "nunca" ha participado en la elaboración de facturas falsas para el Palau ni para ninguna otra empresa, al tiempo que aclaró que tampoco ha participado en la financiación, regular o irregular, de ningún partido político.
Detalló, sin embargo, que ha facilitado a New Letter clientes de todo tipo, entre los cuales partidos como CDC y PSC y entidades como Banc Sabadell y Caixa Catalunya.
Esto fue aprovechado por el diputado de CiU Jordi Turull para cuestionar el objetivo de la comisión, tras destacar que vuelven a aparecer los nombres del PSC y Caixa Catalunya, que estuvo dirigida por el ex ministro socialista Narcís Serra.
El diputado del PSC, Jordi Terrades, criticó que la federación haya buscado, "desde el primer día, devaluar" la comisión. Lo mismo dijo ayer, cuando emplazó a CDC a haber públicas las donaciones privadas que recibe su fundación, la Trias Fargas.
CRÍTICAS AL SILENCIO DE OLLER
Oller insistió en que todos los trabajos realizados para el Palau y para CDC fueron facturados, y que es fácil de comprobar pidiendo un certificado a Correos. Aseguró que ya dio todas las explicaciones necesarias la semana pasada ante el juez y que su presencia en la comisión ha perjudicado a la empresa.
Pese a respetarlo, casi todos los grupos lamentaron esta decisión y coincidieron en destacar que el silencio de Oller sólo ayuda a incrementar la sospecha. "Con su no declaración convierte esta sospecha en una sospecha fundamentada" , aseguró el diputado de ERC, Pere Bosch, que fue el más contundente en rechazar esta actitud.
Desde el PP, Santi Rodríguez añadió que lo que perjudica a su empresa es no querer aclarar ni ser transparente en la relación mantenida con el Palau. "A buen entendedor, pocas palabras bastan", lamentó Daniel Pi, de ICV-EUiA.