BARCELONA 9 May. (EUROPA PRESS) -
El 'boom' inmobiliario de los últimos once años presenta síntomas de haber terminado en Barcelona, ciudad con 5.843 viviendas sin vender el año pasado --un 29,6% más que en 2006--, y con una caída del 17% en la construcción de pisos nuevos (4.872 iniciados el año pasado).
Según datos que presentó hoy el Patronat Municipal de l'Habitatge, dependiente del Ayuntamiento, el precio de los pisos nuevos aumentó en 2006 un 2,2%, por primera vez en años por debajo de la inflación, llegando a los 5.918 euros el metro cuadrado.