Santi Baró gana el XXIV Gran Angular con la novela 'fario'
BARCELONA, 26 Sep. (EUROPA PRESS) -
El XXX Premio de Literatura Infantil Barco de Vapor de la Fundación SM (Cruïlla) --dotado con 15.000 euros-- ha quedado desierto después de considerar el jurado que no se ha presentado "ninguna obra con suficiente entidad para ganar" de entre las 27 candidatas.
Según ha explicado en rueda de prensa la secretaria del jurado, Núria Font, las obras presentadas a esta edición tenían "en general, un nivel más bajo que las presentadas en ediciones anteriores", pese a ser un número redondo.
"Ha sido una decisión unánime y nos sabía mal que fuera así", ha expresado Font, que ha citado historias mal escritas, con defectos de trama e incluso llenas de faltas de ortografía, de modo que nadie fue capaz de convencer de una opción que se sobrepusiera a las demás.
Por otro lado, el XXIV Premio de Literatura Juvenil Gran Angular, dotado con la misma cantidad y con diez originales recibidos, ha sido ganado de nuevo por Santi Baró por su obra 'Fario' --después de que ya ganara en 2011--.
La historia está protagonizada por Andrea, una adolescente rebelde y conflictiva que es expulsada del instituto y es enviada una temporada con sus abuelos a los Pirineos, donde, a través de la pesca, descubrirá un mundo nuevo.
"Es una chica que conocí dando una charla", ha dicho, y su carácter refleja el de una chica enfrentada con sus padres, conflictiva en casa y en la escuela y que no conoce otra forma para pasarlo bien que salir, fumar porros y mostrarse rebelde.
"ME SENTÍ IDENTIFICADO"
"Me sentí identificado porque con 16 años era parecido, tuve que dejar la escuela porque decidí suspenderlo todo voluntariamente", ha explicado el autor, que, sin embargo, ha dicho que tuvo la suerte de tener un padre y un amigo que le mostraron cómo amar la naturaleza a través de la caza y de la pesca.
La novela transcurre en uno de los pueblos de mayor altitud del Pallars, Boldis Sobirà, donde el autor tiene un amigo que es guía de pesca y le invitó a pasar una temporada para impregnarse visitando localizaciones.
Allí vio, entre otras cosas, que la trucha más valorada por el colectivo es la conocida como 'fario', que sobrevive a grandes alturas y de forma salvaje, por lo que ha titulado así su novela.
El autor rechaza querer dar un mensaje con en esta ni en ninguna de sus novelas, de modo que deja al lector libre para llevar a cabo su interpretación.
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