BARCELONA 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
Una treintena de niños de 0 a 3 años y profesores fueron desahuciados el pasado jueves de la guardería Ingenium Child Care, en el barrio de Sarrià de Barcelona, al recibir la dirección del centro una orden de desahucio por parte de los propietarios por no pagar el alquiler.
Según informó a Europa Press uno de los padres de alumnos afectados, los Mossos d'Esquadra desalojaron el edificio un día antes de lo previsto, ya que las profesoras entregaron a las familias una carta para informarles de que se produciría el deshaucio el viernes a las 15.00 horas.
"Como todos sabemos el país atraviesa actualmente una crisis económica y desafortunadamente nuestra guardería también ha sido víctima de ello", según la carta a la que ha tenido acceso Europa Press.
En ella, la guardería avisaba de la "penosa obligación" de cerrar sus puertas al enfrentarse a una orden de desahucio. "Hemos intentado negociarla hasta el último momento", aseguraba, y avisaba a las familias de que el desalojo iba a producirse el viernes.
No obstante, el jueves por la mañana las familias recibieron una llamada del centro asegurando que el desahucio iba a producirse inminentemente, con los niños y profesores dando clase en su interior.
Según dichas fuentes, hacía al menos un año que no había director en el colegio, por lo que la coordinadora ocupaba su lugar. Además, esta persona estaba de baja una semana antes del desalojo, de modo que no había ningún responsable en el centro, por lo que las familias desconocen quien ordenó entregar la carta a los padres.
Fuentes de los Mossos d'Esquadra aseguraron no tener constancia del desahucio debido a que solamente constan en su registro los desahucios con incidencias destacadas, como los que se producen con violencia.
La guardería, situada en el número 13 de la calle Musitu de Barcelona, es un centro privado --por el que las familias pagan unos 500 euros al mes--. Por ello, las administraciones educativas no tienen margen de maniobra.
López aseguró que todos los profesores de la guardería --unos nueve-- se han quedado sin trabajo y los padres sin plaza para sus hijos, que a estas alturas del curso están todas adjudicadas.