TERRASSSA (BARCELONA), 30 (EUROPA PRESS)
La actividad económica descendió en todos los sectores de actividad económica durante el primer semestre del año, incluido el de los servicios, que por primera vez experimentó un retroceso, según concluye el Informe de Coyuntura Económica de la Cámara de Comercio de Terrassa (Barcelona).
Los servicios y el comercio registraron indicadores de desaceleración de la actividad, con una cartera de pedidos en valores negativos. En términos de ocupación, el nivel de empleo en los servicios se mantuvo y en el comercio manifestó una evolución negativa.
En el caso de la industria de la demarcación de Terrassa, el mayor descenso se concentró en los pedidos internos, poniendo de manifiesto el estancamiento de la actividad en todas las ramas del sector, mientras que los pedidos externos experimentaron una disminución "poco significativa".
De mismo modo y por segunda vez consecutiva, la construcción mostró síntomas de paralización debido a la recesión en la cartera de pedidos, ya que el 92,3% de los encuestados con actividad en este sector aseguraron que la actividad disminuyó o se mantuvo respecto al último semestre de 2007.
De este modo, se agrava la tendencia de desaceleración económica del segundo semestre del pasado año, sobre todo en términos de desempleo, que afecta principalmente a la industria y el comercio, mientras que la construcción todavía mostró hasta junio cierta demanda en obra civil.
Por primera vez desde que se realizan estos informes, los empresarios de la demarcación aseguraron que la actividad de sus negocios disminuyó casi a la mitad, mientras que el 40,6% consideró que se mantuvo y el 9,2% que creció.
EXPECTATIVAS DE FUTURO
El informe prevé por primera vez desde 2003 un descenso en la actividad económica para el segundo semestre de 2008, dando continuidad al proceso de estancamiento económico en todos los sectores de la demarcación.
Según la Cámara de Terrassa, las previsiones reflejan que el empresariado de la zona ha asumido la situación de crisis, ya que por primera vez el saldo de expectativas está por debajo de la valoración sobre el funcionamiento de la actividad.
Todos los sectores esperan una recesión de su actividad para el segundo semestre de 2008 por la disminución del número de pedidos y en algunos casos por el aumento en el precio de las materias primas, a excepción del sector alimentario que presenta expectativas positivas.