Joan Carles Gallego y Josep Maria Álvarez asisten al juicio
BARCELONA, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -
Dos estudiantes de Física de la Universitat de Barcelona (UB) han negado este martes haber participado en los altercados de la avenida Diagonal a la altura de Zona Universitària por la huelga general del 29 de marzo de 2012, haber cruzado y quemado contenedores y haber tirado piedras a la Guardia Urbana pese a que un sargento de los Mossos d'Esquadra les identificó como participantes en algunos de estos hechos.
Durante el juicio celebrado este martes en la Ciudad de la Justicia, que proseguirá el jueves, los estudiantes han asegurado que, formando parte de la Asociación de Estudiantes Progresistas, acudieron a su facultad para organizar piquetes informativos, pero que tras participar en una asamblea en la Facultad de Derecho, decidieron marcharse puesto que no había estudiantes y la huelga estaba teniendo éxito, además de que supieron que algunos estaban causando altercados y ellos son "pacifistas".
La Fiscalía acusa a Daniel A.S. y a Ismael B.A. de integrar un grupo de 80 personas que "con clara intención de alterar la convivencia y el legítimo derecho de los ciudadanos a circular libremente por la ciudad" volcaron contenedores, los colocaron en mitad de la calzada y en las vías del Trambaix e incendiaron al menos dos y pide para ellos ocho años y nueve meses de prisión.
Tanto Daniel A.S. como Ismael B.A., que estuvieron un mes en prisión preventiva tras ser detenidos, han declarado que en ningún momento quemaron ni cruzaron contenedores, ni tampoco tiraron piedras contra la Urbana, y que ni siquiera fueron testigos de otros altercados, solamente supieron de ellos en la asamblea.
Sobre la mochila intervenida a Ismael B.A. con líquido inflamable, panfletos, un pasamontañas y petardos, éste ha explicado que los objetos no eran suyos sino de la asociación y que se los metió un compañero en la bolsa tras desistir de realizar una acción simbólica --quemar un "monigote y unos libros"-- que tenían planeada si había muchos estudiantes que no secundaban la huelga.
El sargento de los Mossos d'Esquadra que ordenó su detención ha ratificado en el juicio que les identificó dentro del grupo de unas 15 personas que cruzó y quemó contenedores frente a la Facultad de Física sobre las 10 horas y que les pudo distinguir gracias a la rasta que lleva Ismael B.A. y a unas gafas de pasta negras y amarillas que llevaba Daniel A.S.
La defensa de los dos estudiantes ha tratado de cuestionar esta identificación preguntando al policía donde estaba situado cuando fue testigo de las identificaciones y planteando si pudo ver sus rostros con claridad con la distancia si además, en teoría, llevaban la cara tapada y ropa negra.
El policía ha asegurado que vio a los dos arrojando piedras y otros objetos a la Urbana y, al menos a Ismael B.A., tirando líquido inflamable en un contenedor, y que después se cambiaron de ropa.
Los estudiantes, que también están acusados de faltas de lesiones y de resistencia a la autoridad porque en el momento de la detención huyeron de los agentes de paisano, han asegurado en el juicio que ningún agente se identificó y que salieron corriendo por "miedo" a que fueran fascistas, contrapiquetes o ladrones.
Sin embargo, los cinco mossos que participaron en la detención tras un seguimiento, a la altura de la calle Marquès de Sentmenat, han aseverado que se identificaron como policías desde el primer momento mostrando sus credenciales y que les gritaron en varias ocasiones "alto policía" durante la persecución, aunque todos han negado que las lesiones que presentaban fueran por agresiones de los dos jóvenes, sino que las han atribuido a caídas durante la carrera.
MANIFESTACIÓN
Durante el juicio, se han concentrado decenas de personas a las puertas de la Ciudad de la Justicia, entre ellos los diputados de EUiA Joan Josep Nuet y David Companyon, y a la sesión han acudido el secretario general de CC.OO. de Catalunya, Joan Carles Gallego, y el de UGT de Cataunya, Josep Maria Álvarez.
A la salida del juicio, Gallego ha pedido la absolución de los jóvenes porque no se puede juzgar el derecho de huelga y a la protesta social: "Hacer huelga no es delito".
Ha considerado que son penas "excesivas que no tienen ninguna correspondencia en una sociedad democrática".
Oriol Arcas, del grupo de apoyo de los dos estudiantes, ha expresado que están "muy seguros de las pruebas" que están aportando y que creen que todo irá bien pese a que las acusaciones son graves y ha considerado que para dos personas que solo participaron en una huelga cualquier acusación es excesiva.
