BARCELONA 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
Unos 40 sindicalistas se han encerrado este miércoles en la sede de la Diputación de Barcelona, el edificio de Can Serra, con previsión de quedarse hasta el pleno de este jueves a las 12 horas, en protesta por recortes laborales que se les están aplicando.
Se trata de 27 delegados sindicales de la Junta de Personal de la administración provincial --formada por delegados de UGT, CC.OO. CTEC y CGT-- y una decena de delegados de organismos dependientes o vinculados a esta --del Organismo de Gestión Tributaria (ORGT), el Ayuntamiento de Barcelona y el Institut del Teatre-- que han ocupado la sala de plenos en la planta subterránea y su espacio anexo tras celebrar la propia junta una reunión.
Según ha informado a Europa Press la Presidenta de la Junta de Personal, Marina Martínez --de UGT--, los encerrados piden que el pleno no apruebe mañana el dictamen que modifica las condiciones laborales de los trabajadores según un calendario laboral que consideran que no se ha negociado, sino que ha sido aplicado "unilateralmente".
Uno de los delegados encerrados, Ángel Hoyo --de UGT--, ha señalado que los trabajadores se han visto afectados por reiteradas reducciones salariales, y disminución de días de baja por enfermedad y de libre elección, pese a que el presupuesto de la Diputación ha aumentado en relación al año pasado.
Hoyo ha asegurado que desde hace un año no hay negociación con los representantes de Recursos Humanos de la administración, mientras que uno de los delegados sindicales de CC.OO. en el ORGT Ernest Priego ha valorado que los mismos diputados que aprueban recortes "no los aplican" en los ayuntamientos en los que ejercen de concejales o alcaldes.
A las 15 horas, una hora después del inicio del encierro, el coordinador del área de Hacienda y Recursos Internos, Jordi Roca, se ha acercado a la zona y ha hablado con Martínez.
Minutos más tarde, dos miembros del área de Mediación de los Mossos d'Esquadra se han dirigido a los trabajadores, a los que se ha informado de que a partir de las 19 horas, momento en que se cierra el edificio, su encierro puede suponer la intervención del cuerpo policial e implicar faltas penales.
Los encerrados han mantenido su intención de ocupar el espacio hasta el jueves, y están proveídos con bocadillos, sacos y aparatos electrónicos, a la vez que los mediadores les han ofrecido la posibilidad de abastecerles de agua y comida.