BARCELONA 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un exinspector jubilado de la Policía Nacional ha aceptado dos años de cárcel y no seguir el juicio con jurado por alertar, a cambio de dinero, a investigados por los Mossos d'Esquadra en el barrio de La Mina de Sant Adri de Bess (Barcelona), tras alcanzar un acuerdo de conformidad con la Fiscalía de Barcelona.
Fuentes del Ministerio Público han informado a Europa Press de que un segundo acusado, que era quien recibía las informaciones, también ha aceptado los dos años de cárcel.
Además, la Fiscalía ha propuesto que la pena se suspenda a condición de que los acusados realicen un curso durante tres años.
Según el escrito inicial de la Fiscalía recogido por Europa Press, el exinspector jefe del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) Félix R. facilitó entre 2015 y 2017 al acusado Ángel A., "en su condición de patriarca" del clan Alunda, informaciones de operaciones secretas de los Mossos e investigaciones a sus familiares por vinculación con el tráfico de drogas, a cambio de dinero que recibía en mano.
El expolicía obtenía la información de sus contactos en los Mossos "enviando mensajes y realizando llamadas telefónicas con evidente cariz amistoso a los agentes y mandos de dicho cuerpo policial para obtener, con algún pretexto baladí y superfluo, la fecha y localización de las diferentes operaciones policiales desarrolladas en el barrio de La Mina que afectaban al clan".
Fiscalía pedía hasta nueve años y medio para el exinspector, y cinco años y medio para el segundo acusado, pero ha reducido su petición de penas al introducir los atenuantes de dilaciones y confesión.
Fuentes policiales han informado a Europa Press de que el exinspector, que ya está jubilado, fue investigado y detenido por los propios agentes de Asuntos Internos de la Policía Nacional y que fue apartado inmediatamente de sus funciones de mando policial.