BARCELONA, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Generalitat destinará los ingresos que superen las estimaciones fijadas en los presupuestos a un fondo de reserva que servirá para "reducir deuda o no aumentarla", ha avanzado el conseller de Economía y Conocimiento, Andreu Mas-Colell.
En rueda de prensa tras el Consell Executiu que ha aprobado el proyecto de ley catalán de estabilidad presupuestaria, ha argumentado que, pese a que ahora no se dan estos ingresos extras, con la nueva legislación se sientan las bases para el futuro: "Si la ley hubiese estado vigente hace cinco años, el Idescat hubiese fijado que los ingresos que procedían del mercado inmobiliario --en pleno 'boom'-- no se podían gastar y se debían destinar a reducir deuda, y ahora estaríamos mejor".
Ha detallado el proyecto de ley, que fija en el 0,14% del Producto Interior Bruto (PIB) el déficit máximo permitido en 2018, dos años antes de lo que prevé la ley pactada entre PSOE y PP tras la reforma constitucional.
Asimismo, el pago de intereses de la deuda tendrá carácter prioritario por encima de cualquier otra partida de gasto.
El objetivo del Govern es que esta norma, que se compone de tan solo nueve artículos, se tramite en el Parlament y se convierta en ley antes de fin de año.
Al preguntársele por su compatibilidad con la ley estatal, ha confiado en que "se adaptará" al cuadro normativo español --del que ha recordado que el Govern estuvo en desacuerdo con la forma, pero no con el contenido-- y europeo, pero con una norma decidida por el Parlament.
Mas-Colell ha hablado de "claro compromiso" de Catalunya con la estabilidad presupuestaria, y ha defendido que el límite de las comunidades "ha de ser el mismo que el del Estado", es decir, del 0,14%, y que también debe haber margen para las administraciones locales.
Para conseguir la estabilidad presupuestaria, Catalunya prevé acabar 2011 con un 2,66% de déficit, el doble de lo estipulado por el Estado (1,3%), e irlo reduciéndolo para cumplir los límites de 2012 (1,3%) y 2013 (1,1%), pasando al 1% en 2014 y finalmente, de forma gradual, al 0,14% en 2018.
Los encargados de calcular el déficit serán la Conselleria de Economía y el Institut d'Estadística de Catalunya (Idescat), a partir de la diferencia entre ingresos y gastos en relación al PIB catalán.
La ley catalana mantendrá las excepciones que marca la Constitución respecto a que los límites de déficit y endeudamiento se podrán revisar en caso de catástrofes naturales, recesión económica o situaciones de emergencia legalmente declaradas, cuando lo considere el Parlament.
