Foto: EUROPA PRESS
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El principal activo es la Bolsa de Barcelona, que sigue buscando nuevo espacio
BARCELONA, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Govern ha aprobado convocar dos subastas públicas de tres edificios, entre ellos el de la Bolsa de Barcelona, por un precio de salida de 168 millones de euros.
Se trata de una acción que se enmarca en el objetivo de la Generalitat de ingresar 2.310 millones de euros a través de privatizaciones y concesiones este año para sanear sus finanzas.
Más de la mitad de los 168 millones corresponden al edificio de la Bolsa de Barcelona, si bien todavía no se ha cerrado ningún acuerdo para trasladar la Bolsa a otro espacio.
Ubicado en el número 19 de Passeig de Gràcia, este edificio sale por un precio de 88,9 millones de euros en primera subasta, y por 71,1 millones en segunda, y el adjudicatario deberá formalizar un contrato de arrendamiento a favor de la Generalitat por un periodo de uno a tres años.
El segundo lote lo conforman un edificio situado en Passeig de Gràcia 105, adyacente al Palau Robert y denominado Torre Muñoz, y la Secretaría de Empleo de la Conselleria de Empresa y Empleo de la Generalitat, situada en el número 148 de la calle Sepúlveda.
El precio de salida de este segundo lote es de 79,3 millones en primera subasta (51,9 millones Torre Muñoz y 27,4 la Secretaría de Empleo), y de 63,4 millones en segunda (41,5 y 21,9, respectivamente).
El adjudicatario deberá suscribir un contrato de alquiler a favor de la Generalitat por un periodo de entre uno y tres años para el edificio de la calle Sepúlveda, y por un periodo máximo de 20 años para el de Passeig de Gràcia 105.
El Consell Executiu también ha aprobado liquidar anticipadamente los censos enfitéuticos que gravan estos inmuebles una vez se hayan vendido, o bien redistribuirlos a través de la constitución o ampliación de censos sobre otros edificios que sean propiedad de la administración, o bien a través de su conversión en préstamos.
Desde 2012, el Ejecutivo de Artur Mas ha vendido 34 edificios, todos situados en Barcelona, por 532,6 millones de euros, y esta política de vender y arrendar inmuebles ha supuesto para las arcas de la Generalitat un ahorro de 33,2 millones de euros anuales en concepto de cuotas de censo y gastos de mantenimiento.
