Recuperan 2.900 de las bicicletas desaparecidas gracias a la colaboración ciudadana
BARCELONA, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Urbana de Barcelona ha detenido a 600 personas desde mayo por robar bicicletas del Bicing, de cuya flota de 6.000 unidades han desaparecido desde entonces 3.300, explicó hoy el concejal de Movilidad, Francesc Narváez, cuyos datos se remontan al inicio de la ofensiva de la policía contra el vandalismo en el servicio.
La Urbana ha recuperado en total 2.900 bicicletas, muchas de ellas gracias a la colaboración ciudadana, ya que al encontrarlas, las retornan a las estaciones, según Narváez.
Los detenidos han robado bicicletas --alguna ha aparecido en Lleida y Santander-- para usarlas a su antojo o hacer una carrera y abandonarlas por la calle, situaciones que el Ayuntamiento considera "usos fraudulentos", y que desde enero suman 24.000, menos del 0,1% del total de viajes, que en noviembre fueron 769.722.
De los arrestados, algunos pasan por comisaría, y la Urbana escribe un informe de otros que envía a los juzgados para acusarlos de hurto. El Ayuntamiento está preocupado por una "práctica habitual" que consiste en usar llaves, patas de cabra, destornilladores y la tarjeta de usuario para robar bicicletas de las estaciones. Fuentes del servicio explicaron a Europa Press que llegan a registrar entre 150 y 200 actos vandálicos cada noche.
Usar la bicicleta y abandonarla después suelen hacerlo estudiantes de instituto, mientras que los adultos las roban para tenerlas, unas prácticas que se pueden aprender fácilmente en páginas web y vídeos que ofrecen cursos gratis contra los que el Consistorio no tomará por ahora acciones legales porque no pueden identificar a los autores.
ABONO CONGELADO A 30 EUROS
"El Bicing es un magnífico sistema de movilidad y no queremos que cuatro vándalos acaben estropeándolo", afirmó Narváez, y añadió que el sistema tiene 191.000 usuarios que el año que viene verán congelado el precio del abono anual, de 30 euros. Por ahora no se prevé aplicar abono semanal ni incluir publicidad, ya que desciende mucho por la crisis.
Es difícil localizar la bicicleta que alguien ha tirado al patio interior de un edificio pero el Ayuntamiento se propone atajar los robos en la calle, que Narváez consideró actos de "delincuencia", con tres empleados de la empresa Barcelona de Serveis Municipals (B:SM) que vigilan desde hoy las 440 estaciones, por donde están camuflados y se irán rotando.
Además, Clear Channel --que tiene adjudicada la gestión del Bicing por diez años-- empezó hoy en una estación de Arc de Triomf a colocar una barra de protección de los anclajes que supone 300.000 euros de inversión para todas las estaciones, 27 euros por anclaje.
La nueva barra, que se habrá instalado en toda la red a principios de primavera, dificulta que puedan usarse destornilladores y tiene un segundo sensor para evitar que una sola persona pueda robar la bicicleta, ya que mientras el ladrón engaña a cada sensor no puede coger la bicicleta al mismo tiempo.
A la presión policial y a la mayor protección de las estaciones se suma la extensión de una segunda generación de bicicletas "más robustas", operación necesaria ante una media diaria de seis usos por unidad y 37.000 viajes en invierno. Las unidades tienen mejores frenos, asientos y protección del eje de cambio de marchas.
"No hay mejor manera de hacer autocrítica que mejorando el sistema", defendió Narváez sobre un servicio que suscita decenas de quejas y reclamaciones, y que ha visto como tiene 5.000 usuarios menos desde septiembre. Entre otras razones, el descenso se explica porque ahora el usuario que no renueva el abono en dos meses es dado de baja directamente.
