TORTOSA (TARRAGONA), 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Hospital de Tortosa Verge de la Cinta (HTVC) ha recibido 154 cordones umbilicales desde que hace un año entró a formar parte del programa de recuperación del cordón umbilical para reutilizarlo con finalidades médicas.
Esta cifra, según el jefe de la Unidad de Tarragona y las Terres de l'Ebre del Banco de Sangre y Tejidos, Enric Contreras, "es un éxito para las Terres de l'Ebre porque la puesta en marcha no es fácil y, en cambio, en este año, ya se han obtenido 154 unidades, esto quiere decir que de todas las maternidades de Catalunya que forman parte del programa de cordón umbilical, la maternidad del HTVC ocupa el décimo lugar de 16, teniendo en cuenta que es el primer año que funciona".
Contreras apuntó que "si comparamos la cantidad de cordones umbilicales en relación al número de partos, el Verge de la Cinta ocupa el cuarto lugar de Catalunya, cosa que es una muy buena noticia".
Durante 2006 en el HTVC han habido 1.200 partos, lo que quiere decir, según Contreras, "que de cada 100 partos en 13 se ha hecho la donación del cordón". Contreras recordó que sólo pueden hacer las donaciones las mujeres que van a parir en el hospital tortosino, porque es el único que está habilitado para hacerlo.
A pesar de estos buenos resultados, Contreras animó a las mujeres a que se hagan donantes porque no comporta ningún peligro para el feto ni para la madre, ya que la sangre del cordón se extrae después del nacimiento.
Eso sí, la donante tendrá que pasar, según recordó el médico, por unas pruebas más exhaustivas que el resto de las embarazadas para descartar que padezcan cualquier enfermedad grave y transmisible que la haga incompatible para la donación.
Contreras reconoció que "hace falta una predisposición de la madre, una actitud activa, para ser donante que a veces no se encuentra, ya que las pruebas se hacen durante el embarazo, después de haber firmado su consentimiento, y no vale que en el momento del parto se quiera hacer la donación" porque entonces "ya no es posible".
Según Contreras, se necesitan más donaciones de cordón porque "el problema de las unidades de sangre de cordón es la compatibilidad, no todas las unidades sirven para todos los enfermos, es muy difícil que un enfermo encuentre la sangre que necesita". Por ello, señaló la necesidad de tener "muchas unidades porque de cuantos más tipos de sangre de cordón umbilical se disponga en el banco de sangre, más posibilidades habrá de encontrar compatibilidades entre la sangre y el enfermo que la necesita".
Toda la sangre extraída de los cordones umbilicales de los 16 hospitales que colaboran en el programa se envía al banco central ubicado en Barcelona. Es aquí, donde llegan las demandas de todo el mundo y donde se busca la sangre compatible para curar precisamente enfermedades relacionadas con la sangre, como pueda ser una leucemia, y también para hacer investigación.
La sangre del cordón umbilical, según Contreras, "es rica en las mismas células que tenemos en la médula ósea que son las células que fabrican la sangre, por lo que se utiliza para hacer trasplantes en enfermedades de la sangre".
El banco de Barcelona es un servicio público y gratuito donde la vida de la sangre donada es muy larga, ya que se congela a muy baja temperatura y tiene una duración en principio ilimitada.
El año pasado el banco catalán hizo 74 donaciones para trasplantes, 36 para enfermos del España, 14 de Catalunya y el resto de diferentes paises del mundo. Ninguna de estas 74 donaciones de sangre de cordón umbilical salió del hospital tortosino, tan solo 5 unidades salieron del Joan XXIII de Tarragona y el resto del Sant Joan de Déu de Barcelona.
