BADALONA (BARCELONA), 27 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Instituto Guttmann, el Centro de Investigación en Ingeniería Biomédica (CREB) de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) y la Universitat Rovira i Virgili (URV) han desarrollado un programa de telerrehabilitación, parecido a un videojuego, para personas con daños cerebrales que consiste en el diseño de espacios virtuales que recrean actividades de la vida cotidiana.
Se trata de la Plataforma para la rehabilitación cognitiva, bautizada como 'Previrnec', que está dirigida por la jefa del departamento de Neuropsicología, Teresa Roig. Según informó hoy en rueda de prensa el coordinador del Área de Investigación del Instituto Guttmann, Josep María Tormos, los principales problemas de la rehabilitación cognitiva habitual son el coste y el aburrimiento que provocan, en contra de la motivación necesaria.
Con esta plataforma se consigue que la rehabilitación sea estimulante y divertida y, además, se puede pagar, según Tormos.
"Llevar al terapeuta a casa del paciente y que lo supervise en su actividad diaria para saber donde se le ha de ayudar es imposible, por eso se hacen unos entornos virtuales donde el paciente puede hacer interacciones seguras", explicó Tormos.
Estos programas son personalizados e intensivos y se hacen durante el tiempo que sea necesario.
El programa tiene la apariencia de un videojuego en que el objetivo es realizar una faena concreta. Entre las características de la plataforma se encuentran la simpleza, la rapidez, el realismo y la interactividad. El paciente se coloca delante del ordenador y, en primera persona, con el cursor que representa una mano, hace interacciones simples o complicadas dependiendo del nivel.
Con las puntuaciones que los pacientes obtienen se puede valorar la evolución y, si hace falta, se realiza un plan de tratamiento rehabilitador personalizado.
Según Tormos, no es necesario saber de informática para poder realizar este tipo de rehabilitación, solo se tienen que tener capacidades básicas.
Aproximadamente un año después de iniciar el proyecto, unas 250 personas han utilizado la plataforma. Según Tormos, no todos los resultados han sido positivos, aunque en la rehabilitación cognitiva no hay evidencia científica de éstos porque no hay conocimientos que digan cuál es la respuesta.
Para Tormos, lo importante de esta práctica es que los terapeutas puedan disponer de la información que da el programa. "Normalmente esta información la tienes de manera intuitiva y de esta manera es objetiva", afirmó y añadió que "esto no es un substituto del neuropsicólogo, sino que se trata de optimizar el conocimiento".
PERSONAS CON TRASTORNOS DE MEMORIA Y ATENCIÓN
Los pacientes que hacen este tipo de rehabilitación son los que sufren una lesión en el cerebro que afectan a la memoria o a la atención. Hay pacientes que han sufrido traumatismos craneoencefálicos o que sufren un proceso degenerativo, aunque se puede ampliar a otros ámbitos.
Un público de pacientes son los niños, para los que se está estudiando también una iniciativa. Según Tormos, este tipo de tratamiento es eficaz para la hiperactividad. En la actualidad el proyecto continúa y se han incorporado otros socios como el Grupo de Bioingeniería y Telemedicina de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), la Fundación Catalana de Envejecimiento, de la UAB y el grupo de Investigación en Neurociencia Cognitiva.
