La joven agredida en la comisaría de Les Corts se sintió "violada psicológicamente"

Las dos policías usaron "la mínima fuerza" y temían que se autolesionara

Juicio Por La Presunta Agresión A Una Joven En La Comisaría De Les Corts
EUROPA PRESS
Europa Press Catalunya
Actualizado: lunes, 12 diciembre 2011 17:24

BARCELONA, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -

La presunta víctima de una agresión en la comisaría de Mossos d'Esquadra de Les Corts de Barcelona ha declarado este lunes al juez que se sintió "violada psicológicamente" porque las dos agentes que la cachearon tras ser detenida en abril de 2007 vulneraron sus derechos como persona.

La mujer rusa de 27 años Elena P. --también acusada en esta causa por un delito de atentado contra la autoridad-- afirma que se sintió humillada por los golpes e insultos que le profirieron, tales como "todas las rusas son prostitutas y drogadictas".

Según el fiscal, las policías Susana C. y Tania R. --que se encargaban de registrar, cachear y custodiar a los detenidos-- la desnudaron, la empujaron contra la pared, la tiraron al suelo y le pusieron un casco de moto en la cabeza para llevarla a la celda.

En el juicio, las dos han negado haberle abofeteado, y una ha asegurado: "Le aparté la cara con la mano porque me iba a escupir".

Además de insistir en que utilizaron "la mínima fuerza posible", han justificado su actuación achacando la posibilidad de autolesión de la víctima.

Como afirma la calificación fiscal, la detención se produjo la madrugada del 5 de abril del 2007 después de que la joven insultara, pegara y mordiera a uno de los agentes cuando éstos fueron a su casa, avisados por los vecinos.

La chica se había dejado las llaves dentro de su domicilio en Barcelona y para entrar, con sus gritos y ruidos, llegó a romper un cristal y despertó a los vecinos.

Después de acudir a un hospital, la trasladaron a la comisaría de Les Corts en la zona de custodia, donde se perpetró la presunta agresión que le ocasionó "múltiples hematomas en la cara, las rodillas, la cadera, las muñecas", además de provocarle problemas psicológicos, como ansiedad y fobias.

Por ello, el fiscal acusa a Susana C. y a Tania R. de un delito de trato degradante y de una falta de lesiones, y pide dos años de prisión para cada una, multas de 720 euros y una indemnización de 20.210 euros por las "secuelas psicológicas" a la víctima.

Para Elena P., en cambio, la Fiscalía solicita un año de prisión más una multa de 360 euros, y una indemnización por un delito de atentado y una falta de lesiones.

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