López Tena y Uriel Bertran abandonan CDC y ERC y concurrirán con Laporta en las elecciones

Laporta
Reuters
Actualizado: martes, 27 julio 2010 16:42

BARCELONA, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -

El jurista Alfons López Tena y el diputado Uriel Bertran han anunciado que abandonan la militancia de CDC y ERC respectivamente, y se han puesto a disposición de Solidaritat Catalana per la Independencia, la candidatura que el ex presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, ha avanzado que se presentará a las elecciones al Parlament en busca de un proyecto que busque la independencia de Catalunya.

En rueda de prensa junto a Laporta, López Tena y Bertran han justificado su decisión por el hecho de que ni Convergencia ni ERC han querido integrarse en Solidaritat Catalana y "en coherencia" con su disponibilidad dentro del citado proyecto.

Laporta ha avanzado que empiezan a trabajar para configurar una candidatura que se presentará a las elecciones al Parlament --con la única adhesión, de momento, de Democracia Catalana-- y que se ponen a disposición de la asamblea, que se celebrará el 11 de septiembre. Mañana presentarán las líneas maestras de la propuesta política que centrarán en las ventajas que conllevaría que Catalunya tuviera un Estado propio.

Tras el fracaso de la llamada que hizo Laporta para que se sumaran los partidos nacionalistas a Solidaritat Catalana, ha explicado que se están creando plataformas locales y los equipos de campaña, así como que mantienen las puertas abiertas a los partidos. Ha condicionado también su apoyo al partido que gobierne tras las elecciones al compromiso de celebrar un referéndum sobre la independencia de Catalunya.

Precisamente, López Tena y Bertran habían dejado recientemente de ser consejeros nacionales de sus respectivos partidos después de que la Mesa del Parlament rechazara la admisión a trámite de la iniciativa popular (IP) para convocar un referéndum de independencia en Catalunya.

Tras repasar su trayectoria dentro de CDC, en el que empezó su militancia en 1989, López Tena ha dado por acabada hoy su relación con la formación, mientras que Bertran acudirá mañana al Parlament por última vez por ERC para votar a favor de la prohibición de las corridas de toros.

"Es mi responsabilidad como catalán que no falte ni un voto para conseguirlo, y a partir de entonces pondré mi escaño a disposición de ERC", ha afirmado con un punto de emoción, tras recordar que empezó en las juventudes republicanas y con 18 años se hizo militante del partido.

"Han sido muchos años y con grandes momentos, pero ahora el país necesita una propuesta política que nos permita canalizar un independentismo latente que quiere expresarse en las urnas", ha señalado Bertran, quien ha añadido que dedicará todos sus esfuerzos a este proyecto transversal del catalanismo. En este sentido, no se ahorró críticas al tripartito porque, en su opinión, partidos de "obediencia española" no pueden formar parte del Govern.

Laporta, que ha afirmado que no quiere atribuirse "ningún protagonismo", ha explicado que, de momento, 14.000 personas se han adherido al proyecto, y entre ellos el delegado del Govern a la Catalunya central, Jordi Fàbrega y alcalde de Sant Pere de Torelló (Barcelona). Para López Tena, sería una gran aportación y "magnífico nombre" para la candidatura así como el de otros alcaldes que, ha apuntado, se han interesado por Solidaritat Catalana.

DIÁLOGO CON CARRETERO

Pese a que Laporta inició el diálogo para concurrir a las elecciones con Reagrupament, liderado por Joan Carretero, el ex presidente del FC Barcelona ha admitido que han surgido "una serie de dificultades" en el marco de estas conversaciones --que no quiso desvelar--, aunque se ha mostrado abierto a seguir negociando con esta y otras formaciones y movimientos sociales que quieran sumarse a Solidaritat Catalana.

Por otra parte, como portavoz que es de la Coordinadora Nacional de las consultas locales soberanistas, Bertran junto con López Tena han admitido haber utilizado el 'mailing' y datos personales de los ciudadanos adheridos a las consultas para explicarles que las iniciativas legislativas que habían impulsado habían sido rechazadas en el Parlament.