El novio de la prostituta brasileña asesinada en Lleida reconoce en el juicio que la mató con su pistola

Actualizado: miércoles, 20 febrero 2008 13:29

LLEIDA, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

El novio de la prostituta brasileña asesinada en Lleida en enero del año pasado reconoció hoy en el juicio que la mató con su pistola cuando ella le dijo que ya no quería continuar con su relación. "Yo disparé. En ese momento sentí una especie de suspiro, gemido, y es cuando yo me quedé ahí sentado. No tenía la certeza de que estuviera muerta", dijo hoy en la vista.

"Es la primra vez que disparo, digamos de frente a una persona. La certeza de si yo le había dado, si había dado en el sofá, si le había dado en la cabeza, si le había dado en el hombro, ya digo que no", afirmó en el juicio respondiendo a preguntas de la fiscal.

Celia I.B., de 32 años fue asesinada por su ex novio, Jaume Guash un dentista de Montblanc (Tarragona), de 52 años, el 5 de enero de 2006 en la casa en la que vivía en Lleida, en la calle Magí Morera.

Su cadáver fue descubierto cinco días más tarde y el ex novio, con el que había mantenido una relación de más de dos años, confesó el crimen en la comisaría. Allí contó que le había dado un siroco y reconoció que llevaba pistola habitualmente desde hace nueve años.

En el juicio, reconoció que había discutido con ella y que después de saber que quería dejarlo le había relamado las joyas que le había regalado y parte del dinero que le había dado. "Se sacó los anillos, los tiró y me dijo que me los podía meter por el culo", relató hoy el acusado en la vista.

Antes de comenzar el juicio, la acusación particular explicó que reclamaba 25 años y medio de cárcel para el acusado. La fiscal pide 23 y la defensa dos. En el juicio se personó el ayuntamiento como acusación particular, se trata de la primera vez, a pesar de que el fiscal jefe de Lleida, Juan Boné, calificó hace unas semanas de "demagógico" el anuncio del Ayuntamiento de la ciudad de personarse. "Es como decir que la Fiscalía no hace bien su trabajo, como insinuar que el Ayuntamiento lo puede hacer mejor, sin hablar del coste al ciudadano", dijo entonces Boné.