El Obispado de Lleida promete entregar en 30 días las obras de arte que reclama Barbastro Monzón

Actualizado: martes, 1 julio 2008 16:42

LLEIDA, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Obispado de Lleida se ha comprometido a entregar antes de 30 días al de Barbastro Monzón las obras de arte sacro que le reclama la diócesis aragonesa, según el texto del acuerdo entre ambos obispados al que ha tenido acceso Europa Press. El documento hace referencia a las 88 obras en litigio que están en el Museu Diocesà de Lleida.

El pacto quedó sellado ayer en Madrid por el obispo de Barbastro Monzón, Alfonso Milian, y el administrador apostólico de Lleida, Xavier Salinas, en presencia del nuncio del Vaticano, Manuel Monteiro de Castro, según publicó hoy el diario 'Segre'.

El documento de la Nunciatura Apostólica asegura que el traslado de los bienes a la Diócesis de Barbastro Monzón queda "amparado" por la Constitución Española cuando establece que "ninguna autoridad podrá adoptar medidas que directa o indirectamente obstaculicen" la libertad de circulación y establecimiento de las personas y la libre circulación de los bienes por todo el territorio español, sin perjuicio de que se establezcan "ciertos acuerdos con las correspondientes autoridades civiles con el fin de preservar, dar a conocer y catalogar este patrimonio cultural en posesión de la Iglesia".

Los dos obispados pactaron así dar cumplimiento al Decreto de la Congregación de Obispos del 8 de septiembre de 2005, que ya hablaba de la devolución de las obras a Aragón, así como que será el Obispado de Lleida el que comunicará a la Conselleria de Cultura de la Generalitat el contenido del acuerdo.

El conflicto entre los dos obispados surgió en 1995 con la segregación de 111 parroquias de La Franja (Huesca) de la diócesis de Lleida y que se añadieron a la de Barbastro, que pasó a denominarse Barbastro Monzón y comenzó a reclamar las obras al Obispado de Lleida. Todas las resoluciones de la Iglesia --la primera, en 1998-- han sido favorables a Aragón.

El momento más complicado llegó en 2005, cuando la Congregación para los Obispos ordenó la devolución de las obras. El entonces obispo de Lleida, Francesc Xavier Ciuraneta, presentó un recurso de súplica en la Signatura Apostólica y a la vez pidió permiso a la Generalitat para devolver las obras. Obtuvo negativas en ambos casos.