BARCELONA, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Vueling, Josep Piqué, criticó hoy los controles de seguridad aeroportuarios a los que deben someterse los pasajeros antes de viajar, y aseguró que son "irritantes" e incluso a veces "un poco indignos".
Durante su intervención en unas jornadas sobre la movilidad como eje estratégico en la economía organizadas por Esade Alumni, Piqué constató que volar se ha convertido en algo "profundamente incómodo", y añadió que la culpa "no sólo es de las aerolíneas".
Recordó que el transporte aéreo se ha convertido ya en una 'commodity', es decir, en un servicio que está prácticamente al alcance de todos y que opera en un mercado de competencia perfecta, lo cual hace que el producto sea cada vez más homogéneo.
Piqué apuntó a que en un mercado como este el precio "es todavía determinante", aunque explicó que la estrategia de la compañía, que integró a Clickair, pasa por la diferenciación y en ir dando mayor complejidad a la oferta para atraer a varios tipos de clientes.
En este sentido, explicó que Vueling ha conseguido que el 50% de los viajeros que utiliza el 'puente aéreo' entre Barcelona y Madrid sean pasajeros de negocios, lejos de la imagen que podría desprenderse de una aerolínea que la gente identifica como 'low cost'
El presidente de la compañía prefirió apuntar a que Vueling es una compañía "más eficiente" en costes y que otras que pueden considerarse "high cost" arrastran cargas del pasado que no les permiten alcanzar niveles de eficiencia de estas nuevas aerolíneas.
Explicó que compañías aéreas tradicionales que operan en red tienen un modelo basado en alimentar un 'hub' con una red de vuelos de medio y corto alcance para llenar los aviones de larga distancia. El problema, según Piqué, es que estas aerolíneas tienen que competir en esta red de corta y media distancia con compañías que son más eficientes.
Sobre las perspectivas de futuro del sector, constató que habrá "fortísimos procesos de concentración y alianzas internacionales", como las que ya se están dando para sobrevivir en el mercado.
Asimismo, afirmó que las aerolíneas deberán adaptarse a un perfil de consumidor "con mucha más información" gracias al progresivo acceso a las nuevas tecnologías, lo que derivará en la desaparición de intermediarios entre el oferente y el demandante.
