El PP se vuelca para acabar con la maldición de Girona y lograr un escaño en el Congreso

La campaña del PP en Catalunya se ha volcado este viernes en uno de los objetivos que más ilusión despiertan entre las filas populares: obtener un escaño en el Congreso, algo que solo ocurrió en el año 2000 de la mano de la mayoría absoluta de José María Aznar.

Girona es la única provincia española en la que los populares no obtuvieron representación en 2008, cuando la actual presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, fracasó en el intentó de recuperar el diputado gerundense en el Congreso.

El objetivo es tan emblemático, que el propio candidato del PP por Girona, Enric Millo, ha señalado incluso que "puede hacer realidad un sueño" que arrastra desde hace tres años, cuando tras ser nombrado presidente provincial de los populares, se fijó como meta devolver la voz gerundense a Las Cortes.

"Si lo hacemos bien y todos juntos, conseguiremos poner otra vez a Girona entre las prioridades del Gobierno de España", ha asegurado Millo en un acto junto a Camacho ante cerca de 300 simpatizantes del PP.

La presidenta del PP catalán -que es oriunda de Blanes (Girona) y que ha subrayado el placer de volver a casa-- ha animado a Millo en la lucha por ser diputado, asegurando que "es un orgullo" que sea él quien asuma el escaño que ella no logró conseguir.

Para ello, los populares necesitan los votos de aquellos gerundenses que apoyaban a PSC o CiU y que, según Camacho, ahora piensan en confiar en el PP después de que tanto socialistas como nacionalistas "hayan marginado y abandonado" Girona.

En esa línea, Millo ha tratado de arrebatar a CiU el papel de interlocutor con el futuro gobierno de aquellos aspectos que afecten a Girona, y ha erigido a su partido como "el verdadero voto útil en estas elecciones".

A LA CAZA DE 45.000 VOTOS

Fuentes populares cifran en alrededor de 45.000 votos los apoyos necesarios para que el PP catalán contribuya con un escaño en Girona a que el líder del partido, Mariano Rajoy, sea el próximo presidente del Gobierno.

La única ocasión en la que el PP logró un escañó por Girona fue en 2000, cuando Jordi De Juan consiguió el acta de diputado de la mano de la mayoría absoluta de Jose María Aznar y tras recabar cerca de 47.000 votos.

Posteriormente, tanto en 2004 como en 2008 los populares no pudieron superar la frontera de los 41.000 votos --40.618 y 40.327 respectivamente--, una dinámica que el PP aspira a voltear el 20 de noviembre.