El PSC, eufórico ante un Rubalcaba "de Champions"

BARCELONA, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -

"Hay partido". Este es el mensaje que ha lanzado el PSC poco después de concluir el primero y único cara a cara televisivo entre Alfredo Pérez Rubalcaba (PSOE) y Mariano Rajoy (PP) de esta campaña electoral.

En declaraciones a los periodistas después de concluir el debate, el número 1 por Tarragona y coordinador de diputados y senadores del PSC en Madrid, Francesc Vallès, ha indicado que si en vez de un cara a cara esto hubiese sido un partido de fútbol, Rubalcaba sería un equipo "de Champions", mientras que Rajoy, uno de "primera catalana".

"Yo no había visto un debate con un vencedor tan claro. Rubalcaba es el más sincero, el más valiente y el más solvente, no hay color", ha proclamado un Vallès eufórico, confiando que el debate logre movilizar a favor del partido de la rosa al 25% de electorado indeciso.

"Sabemos que hay mucha gente enfadada", pero pese a lo que digan los sondeos, hay partido, ha indicado Vallès, indicando que los socialistas catalanes no dan ninguna batalla por perdida y que aspiran a ser fundamentales en el resultado del PSOE.

Según Vallès, el debate televisivo ha escenificado a un Rajoy débil y sin propuestas, y que al final se ha visto obligado a "huir con la cola entre las piernas".

"Estamos contentos y tenemos proyecto", ha indicado Vallès, haciendo autocrítica de la gestión del gobierno del PSOE, recalcando que las intervenciones de Rajoy ilustran una acción de gobierno que llega a dar miedo.

El debate lo han seguido dirigentes del PSC así como algunos militantes y trabajadores del partido desde una de las salas de la sede del PSC, donde se hacen las ejecutivas, decorada con una moqueta de intenso color rojo, logotipos del partido y paredes blancas y grises, todo ello acompañado por un pica-pica donde no había ninguna bebida alcohólica, pero sí muchos refrescos de cola, botellas de agua y naranjadas.

En primera fila, estaban el viceprimer secretario y portavoz, Miquel Iceta --que ha seguido el debate acompañado por una lata de Coca-Cola Zero, de la que es un incondicional-- ; la número 4, Esperança Esteve; el todavía primer secretario del partido y ex presidente de la Generalitat, José Montilla; la diputada y sindicalista de la UGT Isabel López; el ex alcalde de Barcelona Jordi Hereu --con una botella de Coca-Cola 'normal'--; el miembro de la ejecutiva e histórico del partido Josep Maria Sala, y el responsable de la escuela de formación del partido, Xavier Marín.

Tampoco han faltado al seguimiento del debate otros componentes de la lista por Barcelona, como Lourdes Muñoz, Meritxell Batet --que se casó con un diputado del PP--, Meritxell Cabezón y la candidata al Senado Mònica Almiñana.

El debate se ha seguido con contención y mucha seriedad, aunque han habido momentos para los aplausos, por ejemplo, cuando Rubalcaba ha dicho que el PP no garantiza la sanidad pública o cuando ha defendido el matrimonio entre personas del mismo sexo.

"¡Rajoy está leyendo!", era el comentario más habitual que hacían los socialistas a lo largo del debate, algo que contrastaban con el plante de su candidato para vivir en La Moncloa.

Montilla ha lamentado que Rajoy haya dicho que en Catalunya el 22% de la sanidad pública la gestiona el sector privado, recordando que en realidad son fundaciones sin ánimo de lucro, López --especialista en temas laborales-- ha lamentado el desconocimiento de Rajoy en cuestiones laborales y un cómplice Hereu insistía en el encorsetamiento de Rajoy.

A lo largo del debate, los asistentes estaban pendientes de las pantallas de plasma, y no de los comentarios en las redes sociales, aunque Iceta en ningún momento se ha desprendido de su 'tablet'.

"En el fondo lo que está en juego es en quien confías: uno no habla claro", ha indicado Iceta a RNE-Ràdio 4 en la 'media parte' de un partido televisivo donde, a juicio de los periodistas que han seguido el debate desde la sede del PSC, ha fallado la realización y el grafismo.