BARCELONA, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
CiU se mueve entre la abstención y el voto a favor en el Congreso del Decreto-Ley que prevé la interconexión de las redes del Consorcio de Aguas de Tarragona (CAT) y Aguas Ter-Llobregat para afrontar la sequía en el área metropolitana de Barcelona.
En rueda de prensa, el presidente de CiU, Artur Mas, dejó claro que la federación "difícilmente" puede estar contra un proyecto que siempre ha defendido, pero subrayó que eso no quiere decir que no sean "tremendamente críticos" con la forma de hacer las cosas de ambas administraciones.
Remarcó que no votarán en contra "para hacer demagogia", como sí hicieron los actuales socios de Govern cuando CiU planteó la interconexión en 2002. "El tiempo pone las cosas y a las personas en su lugar", aseveró Mas, que añadió que ahora los "antitrasvasistas" llevarán a cabo un "trasvase en toda regla".
Sin embargo, hizo hincapié en que antes de llegar a un "hipotético 'sí", la federación pondrá una serie de condiciones, entre las cuales figurará el consenso con el territorio y que la interconexión sea en doble sentido, es decir, que también pueda llevarse a cabo de norte a sur.
Además, vio una "tomadura de pelo" que la tubería que servirá para interconectar las redes se pague a cuenta de la disposición adicional tercera del Estatut. "Defenderemos también que la forma de financiar esta infraestructura vaya a cargo del Estado, pero no a cuenta de lo que nos deben históricamente en materia de inversión en infraestructuras", aseguró.
Con estas condiciones, Mas situó de nuevo el trasvase del Ródano como eje de la postura de la federación en materia de agua. En cuanto a las declaraciones del presidente de la Generalitat, José Montilla, en las que aseguró que el compromiso de Zapatero en cuanto al Ródano era un gesto de "cortesía" hacia CiU, Mas respondió: "¡Qué morro!"
"Que Montilla considere que es pura cortesía demuestra la moral con la que estas personas tratan los asuntos públicos", señaló el presidente de CiU, que se acogió a la "solemnidad" de Zapatero al comprometerse a estudiar el trasvase del Ródano en el debate de investidura.
El agua fue uno de los asuntos que se trataron en la reunión del Comité Ejecutivo de CiU, en el que no estuvo presente el secretario general de la federación, Josep Antoni Duran, por tener que acudir a una revisión médica --"de rutina pura y dura", según Mas-- tras la operación en la que extirparon un tumor del pulmón.