BARCELONA, 19 Jul. (EUROPA PRESS) -
El 17% de los directores de teatro catalanes gana más de 1.000 euros al mes, según se desprende del primer estudio sociolaboral que ha realizado la Associació d'Actors i Directors Professionals de Catalunya (AADPC), que además de constatar la precariedad del sector, habla de 'listas negras' y monopolio.
El director de la AADPC, Joan Maria Gual, ha comentado este martes en declaraciones a Europa Press que el estudio "confirma una serie de temores" que ya se tenían en el sector, entre ellos la precariedad laboral: El 90% de los encuestados confiesa que la economía familiar es conjunta, el 20% de los directores hace dos años que no estrena una obra, y la gran mayoría, un 90%, son pluriempleados.
Más de la mitad del colectivo gana una media de 500 euros al mes, un 22% cobra 250 euros y sólo un 17,4% tiene unos ingresos que igualan o superan los 1.000 euros. Ante este panorama, Gual ha dicho que se ha acabado la "cultura de la queja" y que el estudio les "pone las pilas" para dignificar la profesión.
Ante la evidencia de que en un espectáculo pueden trabajar 30 actores pero un solo director, Gual ha planteado la posibilidad de que algunos directores puedan reorientar su carrera hacia la docencia, impartiendo clases en centros cívicos y colegios. Para ello, en la actualidad hay conversaciones con la Conselleria de Educación y con el Institut del Teatre (IT), que se encargaría de impartir cursos de reciclaje.
El estudio también constata otra de las grandes sospechas del mundo del teatro: su endogamia, con una "pequeña minoría" de nombres consagrados que estrena e incluso repite en un mismo festival. Según Gual, el problema es que no hay capacidad para arriesgar en las producciones, y ha achacado la responsabilidad a los teatros públicos, "porque deberían asumir riesgos y no lo hacen". El 31% de directores ha trabajado alguna vez en un teatro público.
LISTAS NEGRAS Y MONOPOLIO
El informe también habla de 'listas negras' en función de la ideología política --el 40% de los directores cree que existen y el 26% confiesa haberse sentido incluidos en una de ellas-- y de monopolio, que en el caso de Barcelona representa la empresa líder del sector, Focus, según el análisis.
El estudio constata que hay "cierta discriminación positiva, tanto de instituciones públicas como privadas, hacia determinadas empresas dedicadas a la producción y gestión de montajes teatrales". El 88% de los encuestados cree que existe un "monopolio injusto", aunque Gual ha optado por hacer autocrítica: "El monopolio puede romperse. En lugar de quejarnos montemos empresas y plantemos cara", ha dicho.
El estudio, dirigido por Robert Torres, se publica ahora tras dos años de trabajo, 186 encuestas sobre un universo de 435 personas y 15 entrevistas en profundidad a directores, escogidos aleatoriamente, para dar un valor cualitativo a algunos temas. Entre otras, destacan las entrevistas con Hermann Bonnín, Ferran Madico, Ever Blanchet, Julio Álvarez, Toni Casares y Carme Portaceli.
