El subsuelo barcelonés atesora 12 estaciones 'fantasma'

Actualizado: domingo, 28 marzo 2010 13:10

BARCELONA, 28 Mar. (EUROPA PRESS) -

En Barcelona existen 12 estaciones 'fantasma' repartidas entre el Metro, los Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) y Rodalies, que antiguamente prestaban servicio pero con el tiempo se cerraron, según recoge Dani Cortijo en el libro 'Històries de la Història de Barcelona', en que da a conocer lugares poco conocidos en 68 crónicas.

Entre las estaciones 'fantasma' está la de Banco, situada bajo la actual sede de Caixa Catalunya, en la plaza de Antoni Maura. Esta estación se encuentra bajo la antigua ubicación del Banco de España, y la leyenda dice que desde esta parada salía el 'tren del dinero'. De noche, una vez finalizado el servicio de pasajeros, el convoy distribuía la masa monetaria en efectivo entre todas las sucursales.

Esta estación, la de Jaume I y la parada abandonada de Correos se construyeron aprovechando los pasos subterráneos edificados en 1913 bajo la Via Laietana.

Entre 1924 y 1926, cuando se propuso alargar el Metro para que llegara hasta la estación de França, el Ayuntamiento presionó para aprovechar la infraestructura ya existente bajo la Via Laietana y se abrieron las estaciones que hoy ocupan esta calle, Jaume I y Urquinaona.

Este trazado fue durante muchos años el tramo Aragó-Correus de la Línea 3 del Gran Metro de Barcelona. En febrero de 1934 se inauguró la estación de Correos, como estación provisional hasta que el Metro llegara hasta la estación de França. En 1972 la estación se cerró debido a la proximidad de la parada Barceloneta, aunque se siguió utilizando hasta 1977 como intercambiador.

Actualmente se puede ver, delante de la fachada principal de Correos, en la acera derecha del edificio, y bajo una reja metálica de ventilación del metro las antiguas escaleras de acceso. Además desde un vagón de la Línea 4, entre la parada de Jaume I y Barceloneta en dirección La Pau, aún se ve por la ventanilla la estación abandonada.

El autor del libro que ganó el Premi Blocs Catalunya 2009 por el blog 'Altres Barcelonas', decidió publicar las historias colgadas en Internet en un libro editado por Robinbook dentro de la colección L'arca.

En el volumen se pueden encontrar otras anécdotas, como el origen del nombre de la calle Dels Petons. Según explica Cortijo, era allí donde las familias de los condenados a muerte se despedían de los presos antes de que fueran ejecutados.

También explica la procedencia de las marcas en los muros de la Catedral, cuyo su verdadero origen es la firma que hacían los picapedreros que las tallaban.

Otra curiosidad que recoge el libro es la de los agujeros que hay en dos portales de La Rambla de Santa Mònica, hechos por las prostitutas que, con sus tacones, picaban en el suelo para llamar la atención de los clientes.