BARCELONA, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los Mossos d'Esquadra investigan el asalto a un piso de Badalona (Barcelona) en el que los intrusos amenazaron a la propietaria con secuestrar a su hija de un mes. Finalmente, se llevaron 2.000 euros de botín.
Según avanzó el diario 'Avui' y confirmó a Europa Press la Policía catalana, los asaltantes conocían los movimientos de la familia, ya que sabían que el marido acababa de salir del domicilio y que en la casa había 2.000 euros en metálico.
Sobre las 22.30 horas del 26 de septiembre una mujer llamó a la puerta del domicilio. La propietaria abrió sin desconfiar, pensando que su pareja se había olvidado algo, y sin observar a través de la mirilla. Cuando vio a la visitante quiso cerrar la puerta diciendo "no quiero comprar nada", pero la extraña puso el pie en el umbral de la puerta para evitarlo.
Inmediatamente, entraron dos hombres encapuchados que empujaron a la víctima hacia el interior del piso y la llevaron a la cocina, donde la ataron e intimidaron con un cuchillo. Los tres intrusos hablaban con acento suramericano.
En un momento determinado, los asaltantes cogieron a la menor, de un mes de edad, y amenazaron con secuestrarla si la madre no les decía donde escondía el dinero y las joyas. Finalmente, los ladrones se fueron con 2.000 euros y algunas joyas.
Según fuentes cercanas a la investigación, los delincuentes tenían información concreta sobre el dinero en efectivo que había aquella noche en el piso, aunque la víctima dijo no recordar que comentara a nadie este hecho.
Otro detalle que está investigando la Policía es que los delincuentes habían espiado los movimientos del marido, ya que sabían que había salido poco antes de entrar ellos al inmueble.
Estos puntos hacen sospechar a los investigadores que se trata de un grupo que tuvo conocimiento de los movimientos de la familia y que no se dedican habitualmente a este tipo de asaltos.
EL AYUNTAMIENTO NO TEME CASOS SIMILARES.
Igualmente, fuentes del Ayuntamiento de Badalona consultadas por Europa Press explicaron que no creen que haya un grupo especializado en este tipo de robos en la ciudad y que se trata de un caso aislado.
Según las mismas fuentes, no ha habido robos similares en las últimas semanas, sino que se trataría de un caso extremo, ya que "tenían bastante información de la familia".
