La cosecha de Catalunya ha sido un 34% más baja que la media de los últimos cinco años
LLEIDA, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
La consellera de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, Teresa Jord, ha asegurado este lunes en una visita a la empresa frutícola Baró i fills de Albatrrec (Lleida) que la campaña de recolección de fruta de hueso en la provincia --de melocotón y nectarina, fundamentalmente-- ha acabado con los mejores precios de los últimos siete años.
"Este incremento de los precios de venta está directamente relacionado con la falta de producto en toda Europa debido a las heladas primaverales", ha informado la Conselleria en un comunicado.
Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural sostiene que la poca disponibilidad de melocotón y nectarina ha supuesto "un nivel de existencias muy bajo durante todo el verano, en línea con la baja producción, y esto ha hecho que los precios se hayan mantenido bastante estables y altos".
Por productos, en el caso del melocotón rojo, el precio medio de venta de las empresas frutícolas ha sido de 1,10 euros por kilo, cuarenta 40 céntimos por encima de entre los años 2017 y 2019, los peores años después del veto ruso de 2014.
Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural señala que lo mismo ha pasado con la nectarina, que este año ha tenido un precio de venta medio en salida de central de 1,5 euros por kilo, casi el doble del precio de venta de los años posteriores al veto.
PLAN DE ARRANQUE
La Conselleria agrega que la climatología ha sido clave en esta mejora de precios y remarca que la aplicación del su plan de acción de la fruta dulce entre los años 2017 y 2020, con medidas como el plan de arranque de árboles, "se ha convertido en absolutamente necesaria para adecuar la oferta a la demanda existente en el mercado global de la fruta de hueso y revertir así la crisis de precios".
El clima durante la primavera, con intensas heladas y granizadas, ha influido directamente en la cosecha de melocotón y nectarina de toda Europa: ha sido la más baja de los últimos 30 años con 2.444.922 toneladas, lo que supone una disminución del 18% respecto del año pasado y de un 34% en comparación con el promedio 2015-2019.
En Catalunya, la cosecha ha sido de 307.000 toneladas, un 11% inferior a 2020, que ya fue un año de poca producción, y si se compara con la cosecha media de los últimos 5 años, la caída llega al 34%.
La Conselleria apunta que, considerando que el potencial productivo de Catalunya se sitúa en 550.000 toneladas, "la caída ha sido de un 43%, 240.000 toneladas menos de los que se podrían llegar a producir".
