BARCELONA, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Economía y Conocimiento, Andreu Mas-Colell, ha alertado este martes de que la tesorería de la Generalitat, y por tanto sus proveedores, "sufrirán" si el Estado no autoriza a Catalunya al menos 11.662 millones de endeudamiento.
En comparecencia en la Comisión de economía, finanzas y presupuesto para explicar las líneas estratégicas de su departamento, Mas-Colell ha argumentado que el Govern ha calculado sus necesidades de endeudamiento de forma "bien fundamentada y en algún aspecto conservadora" para lograr reducir el déficit al 1,3% del PIB a finales de año, frente al 3,6% de finales de 2010.
Mas-Colell ha insistido que "sin la corresponsabilidad" del Gobierno central, Catalunya no podrá cumplir los objetivos de déficit, y ha reclamado al Estado que cumpla lo que marca el Estatut y el nuevo modelo de financiación --como el Fondo de Competitividad-- respecto a lo que debe ingresar a Catalunya , que cumplirá su parte reduciendo un 10% el gasto.
Sobre este punto, ha matizado que ve con "frustración la persistente tendencia del Gobierno central de establecer normas que implican gasto a nivel autonómico", lo que perjudica no solo a la credibilidad de las autonomías, sino a la del Gobierno, considera.
PACTO FISCAL
Asimismo, ha avanzado que el Ejecutivo catalán hará hincapié en la consecución de un "pacto fiscal en la línea del concierto económico" a partir de 2012.
En su opinión, la contribución fiscal actual de Catalunya al resto de España, es "desorbitada en comparación con los estándares internacionales", por lo que la Generalitat exigirá al Gobierno que retome y actualice el cálculo de las transferencias fiscales.
Ha añadido que España puede equilibrar las balanzas fiscales sin problemas serios, y se ha preguntado: "Si el resto de España no pudiese sobrevivir si nos devolviese nuestra transferencia ¿cómo es que nosotros, que somos menos de la cuarta parte de su PIB, hemos de sobrevivir haciéndola?"
Siguiendo la línea del concierto económico, la Generalitat reivindicará que "toda" la recaudación de impuestos se haga a través de una agencia catalana de tributos y que desde esta se envíe lo que corresponda a la Hacienda estatal.
"El incidente sobre el Fondo de Competitividad --de más de 1.000 millones para Catalunya en 2011, pero que el Estado no pagará hasta 2013-- es una demostración clarísima de hasta qué punto el control de la caja es un asunto de importancia central", ha dicho, y asegura que el pacto fiscal no es inconstitucional porque la Constitución no habla de ello.
MÁS PESO DE LA GESTIÓN PRIVADA
Durante su intervención, Mas-Colell también ha abogado por un mayor peso del sector privado en el ámbito público: "Nos hemos de librar de la idea de que garantiar un servicio público implique siempre que la prestación se deba hacer desde la administración pública".
Ha apuntado como alternativas posibles la prestación de servicios desde entidades privadas, y desde agencias controladas a distancia vía contratos programa o similares.
También ha asegurado que en la situación actual "habrá muchas cosas que, o no se harán, o se deberán hacer sobre la base de la colaboración público-privada".
En todo caso, ha hablado de dos años de "ajustes y sacrificios", además de plantear el nuevo pacto fiscal, para recuperar las finanzas catalanas y conseguir que en 2014 se haya superado la crisis y se esté creando empleo.
Mas-Colell volverá a la comisión de economía del Parlament próximamente para realizar sesiones sobre la nueva normativa financiera estatal y las acciones del Govern para defender el modelo catalán de cajas, y sobre el contenido del Plan de reequilibrio económico y financiero de la Generalitat 2011.