PSC, ICV-EUiA y UpB ven al gobierno rendido a los populares
BARCELONA, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Barcelona, Xavier Trias (CiU), afronta la recta final de las ordenanzas fiscales --impuestos y tasas-- y Presupuestos del 2012 sólo con el PP, después de que los haya aprobado inicialmente este martes con el único apoyo de los populares.
La aprobación se ha producido en una comisión municipal extraordinaria de Economía, en la que toda la oposición --PSC, ICV-EUiA y UpB, que integra a ERC-- ha votado en contra a excepción del PP, y ahora se abrirán 30 días de exposición pública para presentar alegaciones tras su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).
La propuesta de Trias, que puede diferir tras incorporar las condiciones del PP, se eleva a 2.292,9 millones de euros, y se ve modulada por el PP con reducciones de impuestos, más gasto social, más austeridad y un pacto suplementario, que incluye concertar plazas de guardería a partir del curso 2012-13.
La teniente de alcalde de economía, Sònia Recasens, ha dicho que se ven "encorsetados" por el Plan Económico Financiero (PEF) para alcanzar el equilibrio presupuestario en 2013, y con las inversiones fuertemente comprometidas por las consignadas por el anterior gobierno.
Recasens ha sido bien explícita para ilustrarlo: "La ilusión de un gobierno cuando llega, y más como el nuestro con lo que ha estado esperando, es invertir a saco y alguien ya pagará la fiesta".
Javier Mulleras (PP) ha destacado que han cambiado el rumbo de un modelo presupuestario agotado y superado del anterior gobierno de PSC e ICV-EUiA, y ha destacado que los populares han actuado con "gran responsabilidad" apoyando los de Trias, lo que ha dicho que les supone una gran oportunidad, ahora que quieren formar gobierno.
"MATRIMONIO TRIAS-ALBERTO"
Los que han votado en contra han coincidido en que CiU se ha rendido al PP, y Guillem Espriu (PSC) cree que han sido testigos del "matrimonio entre Trias y Alberto Fernández Díaz" --el líder municipal popular--, lo que ha matizado hablando de unión civil ante los reparos de Mulleras (PP) por referirse a matrimonio entre dos hombres.
Joaquim Mestre (ICV-EUiA) ha criticado que las cuentas "expresan claramente un giro hacia la derecha", y ha acusado a Recasens de enmascarar con su discurso unas cuentas regresivas de simple gestión, sin ambición de ciudad ni proyectos.
El líder de UpB, Jordi Portabella (ERC), se ha adjudicado el título honorífico de socio preferente, tras haber pactado reiteradamente antes con PSC e ICV-EUiA, y ha afirmado que CiU es "prisionera del PP", insinuando que en breve formarán gobierno con Trias.
El gobierno compara sus números con la previsión de la liquidación de las cuentas de este año, pero ha echado mano de la previsión inicial de inversión para este año para demostrar que la suya no decae a la mitad --de 663 a 363-- sino 5 millones.
A Portabella no le ha pasado por alto el cambio de rasero, reprochando a Recasens que hace la comparación que le parece oportuna, y ha insistido en que la inversión cae a casi la mitad, sentenciando que "esto es así como que es de Unió y va a misa".
CiU y PSC han discrepado sobre quién es solvente, y mientras Recasens ha dicho que "o no enderezas la situación o acabas con un agujero de 8.000 millones" como la Generalitat, Espriu ha reivindicado su política presupuestaria excelente con Pilar Solans al frente.
