BARCELONA, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
El tripartito de la Generalitat no construyó 67 de los equipamientos que pactó con el Ayuntamiento de Barcelona, de forma que sólo se realizaron 41 de los 108 que se recogían en convenios, ha afirmado este miércoles el primer teniente de alcalde, Joaquim Forn (CiU), y el nuevo Gobierno municipal ha pedido al Govern un calendario "exigente y a la vez realista".
Además, 10 de estos 41 equipamientos construidos no han llegado a abrirse, por falta de presupuesto ordinario para su funcionamiento, entre otras razones.
Lo ha dicho en una comparecencia en la Comisión de Presidencia y Régimen Interior a instancias del PSC para explicar la reunión del 25 de julio entre el alcalde, Xavier Trias, y el presidente de la Generalitat, Artur Mas, y el cumplimiento de los acuerdos en materia social, educativa y sanitaria.
Los equipamientos se pactaron con el convenio de equipamientos sociales de 2005-07, el de calidad de la red sanitaria de Barcelona de 2008 y el mapa escolar, que preveía 14, de los cuales cuatro se han finalizado.
La comisión ha estado marcada por las críticas de los grupos del anterior gobierno --PSC e ICV-EUiA-- porque entienden que Trias no ha defendido Barcelona ante la Generalitat y que está subordinado a ella, ante lo que Forn ha destacado que el gobierno ha optado por ser exigente por la 'vía silenciosa'.
Además de con Mas, Trias ya se ha reunido entre agosto y septiembre con los consellers Lluís Recoder (Territorio y Sostenibilidad), Josep Lluís Cleries (Bienestar Social y Familia), Pilar Fernández Bozal (Justicia), Irene Rigau (Enseñanza), Ferran Mascarell (Cultura) y Andreu Mas-Colell (Economía), aunque bien poco ha trascendido de estos encuentros.
"No nos pelearemos cada día con la Generalitat, no es nuestra voluntad --ha afirmado--. No queremos reproducir el escenario de los años 80", ha sentenciado, en referencia al periodo de confrontación entre el entonces alcalde Pasqual Maragall y Jordi Pujol al frente de la Generalitat.
El edil socialista Gabriel Colomé ha considerado que Trias "no es el alcalde sino el delegado del Govern en Barcelona", y le ha acusado de estar subordinado también al PP, lo que ha ejemplificado con el entendimiento sobre el modelo de guarderías y el 'pacto del hotel Berna' sobre los gobiernos de Badalona, Castelldefels, la Diputación y el apoyo del PP a CiU en el Parlament.
"El crédito se acaba, y llevan casi 100 días gobernando --ha dicho Joaquim Mestre (ICV-EUiA)--. No nos gusta ver a un alcalde claudicando ante el Govern, que espera que la tormenta pase cuando hay un recorte", ha advertido, y ha agregado que, con su auditoría, la Generalitat pretende cubrir ideológicamente su voluntad de recortar servicios públicos básicos y colocarlos en manos privadas.
LAPORTA Y EL BARÇA
El edil de UxB y ex presidente del Barça, Joan Laporta (DC), ha sido más ecuánime, y ha cargado contra la desventaja de Barcelona frente a Madrid, lo que ha ejemplificado con que para ir a la final de la Copa del Rey en Valencia un 'culé' procedente de Barcelona pagó 70,5 euros de peaje para hacer 702 kilómetros entre la ida y vuelta, y un madridista, nada para los 710 kilómetros que separan Valencia y Madrid.
Àngels Esteller (PP) ha criticado la actitud "más de subordinación y complacencia" de Trias, y ha insistido en que los convenios sobre equipamientos deben cumplirse pese a que sean fruto, en su opinión, del fracaso del tripartito y el Gobierno municipal de PSC e ICV-EUiA que no los exigieron, una crítica que también ha lanzado Forn.
Ante todo, el teniente de alcalde ha reprochado a los grupos del anterior gobierno que hablen de subordinación cuando "prometieron equipamientos sin recursos", y el tripartito dejó un déficit de 8.352 millones de euros, cuando había previsto unos 4.700.